El debate no se detiene y la Dirección General de Tráfico sigue reconociendo que la medida de aumentar la velocidad en autovías y autopistas sigue en estudio, tal y como anunciaba su directora María Seguí. Es evidente que es necesario un cambio y un debate acerca de la velocidad máxima, así como una adaptación consecuente con la tecnología de los automóviles con que contamos actualmente, por supuesto sin olvidarnos de la seguridad de las carreteras españolas. Pensemos que un aumento de los límites de velocidad también exigiría extremar las labores de mantenimiento y la vigilancia de la integridad de las infraestructuras.
Pero de momento y hasta que se analice la viabilidad de un aumento en autovía, el estrecho margen existente entre los 120 km/h de estas vías y los 100 km/h que hasta ahora existían en las vías secundarias aumentará, dado que el Ministerio del Interior reducirá de 100 a 90 km/h la velocidad máxima en carreteras convencionales. La medida ha sido anunciada en plena campaña de seguridad para extremar la vigilancia de las carreteras secundarias que actualmente se cobran un 82% de las víctimas mortales en accidentes de tráfico.
El próximo cambio en los límites de velocidad podría ser un aumento en autovía
Según el ministro Fernández Díaz existe consenso social a este respecto y la idoneidad y las ventajas de reducir el límite de velocidad en estas carreteras es de suficiente relevancia como para tomar la medida en este momento. Según un estudio de ITRASA (Investigación Técnica y Reconstrucción de Accidentes), la disminución en 10 km/h podría reducir la distancia de frenado en 12.7 metros y hasta 21 metros si el asfalto está mojado.
Pensemos también que actualmente el mayor temor de Tráfico y el Ministerio del Interior es el de enfrentarse a un escenario en el que la cifra de fallecidos aumente. Precisamente el pasado mes de mayo se producía el primer repunte en la cifra de fallecidos de los últimos catorce meses y las previsiones no eran muy halagüeñas en tanto el descenso que hemos vivido en los últimos meses está abocado a una estabilización de las cifras y un previsible repunte. Esta medida probablemente ayudará a que los siniestros y las graves consecuencias de estos vayan reduciéndose paulatinamente.
La pregunta que nos hacemos ahora es la siguiente: ¿estará dispuesto también el Ministerio del Interior a aumentar el límite de velocidad en autovía y autopista a 130 km/h?
Fuente:
En Diariomotor: Peligro en las vías secundarías, doble sentido doble precaución | ¿Ha llegado el momento de aumentar el límite de velocidad máxima a 140 km/h? | La DGT rebajará el limite a 90 km/h en carreteras convencionales