Tiene motor y cambio manual de deportivo, pero con 4,7 litros de consumo es un pequeño y económico japonés del que España se ha olvidado
No es, precisamente, uno de los coches con mayor relevancia comercial de nuestro mercado, pero sin duda propone una mezcla de cualidades que, para quienes están dispuestos o quieran salirse de las opciones habituales dentro de su segmento, hacen que se trate de una compra tan racional y lógica como la de cualquiera de sus oponentes añadiendo, además, cierto componente pasional sobre estos. Y es que, de igual manera que sucede con el Mazda3