De nuevo llega la primavera a nuestros coches acompañada de las alergias. Se hace necesario el uso de filtros para evitar todo tipo de alergenos como son el polen, los ácaros o la carbonilla. Un estudio de la organización estadounidense Car Care Council demuestra que en el interior de los vehículos, la concentración de todos estos agentes alérgicos aumenta hasta 6 veces respecto a la cantidad de los mismos al aire libre.
Un consejo que realiza esta organización es que los filtros de aire, que suelen traer de serie la mayoría de los vehículos de tipo medio, se deben cambiar cada 20.000-25.000 km. Éstos, gracias a su fibra sintética cargada electrostáticamente, son capaces de retener la mayor parte del polvo, esporas, hongos, polen,carbonilla etc.
Vía: ElMundoMotor