El gigante automovilístico americano General Motors ha presentado a través de su departamento europeo una serie de medidas cuyo propósito es reducir las emisiones de CO2 de sus vehículos mientras que se mejora la eficiencia y versatilidad de los mismos.
Estas medidas, englobadas con el nombre de EcoFlex, apuntan a tres objetivos diferentes: avance en los motores de combustión, uso de combustibles alternativos y la incorporación de nuevas tecnologías. Los vehículos desarrollados a partir de estas requisitos se pondrán a la venta a partir del año 2008 y los podremos ver con anterioridad en el Salón del Automovil de Frankfurt.
En el apartado de los motores de combustión se mejorará a través de los motores Eco Turbo. Propulsores de baja cilindrada equipados con sistema turbo. Menor consumo y mayores prestaciones para vehículos alimentados tanto por gasolina como por gasóleo.
El uso de los biocombustibles se acentuará, con nuevos avances en el uso del bioetanol, el biodiésel, etc. También se está estudiando el uso del CNG (gas natural comprimido) para impulsar los vehículos de GM.
El concepto de E-Flex, que supondría un gran avance tecnológico, engloba la combinación de propulsión eléctrica y regeneración de energía a través de otras fuentes. Los modelos provistos de esta tecnologíca equiparían un motor eléctrico junto a otro que funcionaría con energía solar, gas natural comprimido, hidrógeno, bioetanol, etc, con la única función de recargar la energía.
Vía: elmundomotor
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