Sin duda uno de los Beatles con una forma de ser más rocambolesca y, sobre todo, rebelde. John Lennon despuntaba por su curioso gusto material y este Rolls Royce Phantom V. Simplemente el repintado en amarillo es suficientemente “vistoso” pero el remate con esas pinturas estilo hippie es el no va más.
Parece ser que el acabado final de esta enorme berlina británica tiene que ver precisamente con la rebeldía de este ex-Beatle. Lennon no estaba de acuerdo con ciertas costumbres británicas, ni siquiera con la actuación del país en Biafra y Vietnam. Su disconformidad con las mismas movieron a Lennon a mofarse de su propia nación a través de acciones como la que realizó con el pobre Phantom V.
Finalmente este clásico acabó en 1985 en manos de un comprador que pagó por él la friolera de 2.3 millones de dólares.
Vía: argentinaautoblog