Evisol, una empresa dedicada a la producción de componentes para vehículos híbridos y eléctricos acaba de presentar un potente deportivo basado en el chasis del Lotus Super Seven. Se trata del ThoRR, un roadster ligero completamente eléctrico con un nombre que evoca al dios del trueno de la mitología nórdica. Estéticamente pasaría por un Caterham, pero bajo el capó todo cambia.
Impulsado por un motor Siemens de alto rendimiento, en conjunción con unas baterías de polímero de litio de alta capacidad produce una potencia y un par continuos de 91CV y 160Nm respectivamente y una potencia y par máximos de 272 CV y 450 Nm. La entrega de potencia en un vehículo eléctrico es lineal y constante (una sola marcha se estira hasta las 10.000rpm), y teniendo en cuenta que el conjunto pesa 755 Kg podemos esperar unas prestaciones muy destacables.
La autonomía del vehículo según los estándares europeos es de 200km. La compañía sostiene que a una velocidad constante de 80 km/h las baterías durarán unos 230 km y a una velocidad de 120km/h la autonomía se reduce a 140 km. Para cargar el vehículo se enchufa a la corriente mediante tres enchufes estándar. La vida estimada de las baterías es de unos 1.200 ciclos de carga/descarga, tras los cuales habrá que cambiarlas.
Al igual que los Caterham CSR, Ariel Atom o Lotus Exige el vehículo carece de cualquier elemento superfluo, no hay ningún lujo a tu alcance cuando te sientas en sus duros bacquéts de competición. Es un deportivo de pura raza que no cuenta siquiera con elementos básicos como dirección asistida, ABS, parabrisas o aislamiento acústico. El Tesla Roadster tiene un nuevo competidor, y viene con las pilas cargadas.
Vía: Carscoop
