Audi ha presentado su nuevo sistema de control de válvulas denominado AVS (Audi Valvelift System), que se incopora como novedad dentro de un paso lógica en la evolución de las mecánicas de los motores de combustión. Las ventajas que ofrece incluyen un mejorado comportamiento del motor con una respuesta más ágil al acelerador, un menor consumo de carburante y un tacto más suave del motor. ¿Cómo?
Este sistema está basado en el actual sistema de apertura de válvulas variable en el tiempo y aporta el siguiente paso en la evolución de estos sistemas, ofreciendo una nueva variabilidad para la elevación de las propias válvulas. ¿Ésto qué significa exactamente? Pues que se puede modificar la altura, dentro de unos determinados rangos, a la que se elevan las válvulas según la carga y la necesidad de rendimiento que se le está exigiendo al motor.
En momentos de baja carga, la elevación variable de las válvulas oscila entre los 2 y los 5.7 mm, mientras que a una carga más alta las válvulas se elevan hasta un máximo de 11 mm, cuidando en todo momento que, independientemente de la altura de apertura de las válvulas, la admisión se produzca de forma correcta dentro de los cilindros.
El rango de revoluciones estándar de operación para el AVS se sitúa entre las 700 y las 4.000 rpm, con un punto rojo de funcionamiento en las 7.000 rpm y un máximo en la escala, en cuanto a ahorro de combustible, con un funcionamiento constante a revoluciones medias. Este ahorro puede alcanzar hasta un 7% en comparación con el mismo motor sin esta tecnología.
¿Cuál es el siguiente paso? Una futura versión de este sistema tendrá la capacidad de “desconectar”, de forma completa, el funcionamiento de un cilindro con el suculento ahorro de combustible asociado.
En principio, los motores que incluirán esta tecnología AVS serán los de inyección directa 2.8 y 3.2 V6 FSI, para los modelos A4, A5, A6 y A8.
Vía: worldcarfans
En Diariomotor: Motores sin árbol de levas para el Fiat 500 y el Alfa Junior en 2009