Aprovechando un ligero lavado de cara del Serie 6, la marca alemana BMW ha preparado un suculento paquete deportivo que hará las delicias de los capacitados para hacerse con esta gama con una serie de toques de nuevo diseño, introducidos de manera muy similar en el restyle del Serie 3 y en el nuevo Serie 7.
Básicamente esos nuevos detalles incluyen por ejemplo un nuevo capó, que guarda un contorno central muy similar al del Serie 3, o la inclusión de 7 colores diferentes disponibles. Disparando hacia el aspecto más agresivo, se encuentran ya unas llantas de aleación cuyo diámetro sube hasta las 19” y también una suspensión M Sports para importar al modelo una estabilidad superior. Especializando en la gama Cabriolet y en el 650i coupé, se añaden a mayores una sistema de escape renovado con una terminación en cromado oscuro para los tubos posteriores.
BMW no podía sacar un pack de añadidos deportivos sin pensar en el interior, que por supuesto no olvida el nivel impuesto por ediciones anteriores. El volante de tres radios es de piel, con un corte deportivo y por supuesto bajo la denominación característica M. Los asientos, por su lado, hacen juego al tapizado con una terminación deportiva y piel de calidad y las inserciones metalizadas no se hacen esperar en distintos puntos del habitáculo.
Sin duda un buen movimiento para explotar los recursos del Serie 6, un coupé con marcado acento aguerrido y con esa seriedad que caracteriza a la marca bávara. Con este pack, el Serie 6 no sólo gana en deportividad sino también en calidad interior.
Vía: autoblog.nl
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