En el Salón de París la inglesa Aston Martin realizará una presentación que no va sobre ruedas sino sobre la muñeca. Tal y como se recuerdan aquellos gadgets que se han gastado los diferentes James Bond a lo largo de la historia, se presentará el AMVOX2 DBS Transponder, un reloj de alta gama que tiene la capacidad de arrancar el DBS a distancia entre sus numerosas funciones.
El reloj ha sido creado por Jaeger-LeCoultre y cuenta con una apertura a través de la cual se pueden ver los mecanismos que lo forman, recordando a la vista de los frenos a través de las llantas de aleación. Funciones como el cronógrafo pasan a un segundo plano ya que, gracias a un circuito transpondedor integrado, el reloj permite a golpe de botón tomar el control del lujoso deportivo e incluso realizar el arranque de su propulsor. Pensando en los peligros que supone este medio alternativo de gobierno del vehículo, Aston Martin se encargará expresamente de configurar el transmisor con la codificación de cada DBS a solamente el propietario del vehículo. Totalmente lógico.
Puede que algunos acaudalados propietarios difieran de la opinión de seguridad que, según Aston Martin, ofrece este servicio y no quieran tan inútil original habilidad para el reloj. Dejando esa característica aparte, no deja de ser un accesorio de categoría.
Resulta fácilmente imaginable que su precio estará acorde con la exclusividad de ambos fabricantes, relojero y automovilístico, pero seguramente será asequible para cualquiera que pueda hacerse con un DBS. Por otro lado no resulta nada novedoso, por ejemplo GM ya lanzó en su momento un llavero con tales capacidades (aunque diría que no mostraba la hora).
Vía: egmcartech
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