Por el momento, el único propulsor disponible en el pequeño todocamino Ford Kuga es un 2.0 TDCi de 136 CV. Alimentado por gasóleo y con 320 Nm de par máximo es un aliado eficiente y cómodo que encaja con el carácter del Kuga. Sus prestaciones no impresionan pero no son para nada desdeñables, acelera hasta los 100 km/h en 10.7 segundos y su velocidad punta es de 180 km/h. Los fans de la gasolina esperaban con ganas este anuncio de Ford.
A principios de 2009 se ofrecerá también un propulsor 2.5 turboalimentado de cinco cilindros en línea y 200 CV de potencia. De origen Volvo y con 25 CV menos que en los Mondeo o Focus ST cuenta con una reserva de par motor de 320 Nm que se entrega de manera lineal entre las 1.600 rpm y las 4.000 rpm. El corazón del Kuga ahora lo lleva hasta los 100 km/h en menos de 10 segundos y aumenta la velocidad máxima hasta unos respetables 208 km/h.
Se podrá asociar a una caja manual de seis velocidades o a una Durashift automática de cinco velocidades y no habrá versión de dos ruedas motrices, el sitema de tracción integral tipo Haldex es de serie en el Kuga 2.5T. Inevitablmente, la cilindrada del nuevo motor y el hecho de estar alimentado por gasolina repercuten negativamente en los consumos: 9.9 l/100 km (234 g/km) para la versión manual y 10.4 l/100 km (244 g/km) y una menor velocidad máxima para la versión automática.
Pagarás en ambos casos el 14.75% de Impuesto de Matriculación pero a cambio obtendrás un propulsor muy elástico y de funcionamiento suave pero contundente. Con el motor 2.5 Turbo el Kuga se pone a la altura de rivales como el Volkswagen Tiguan que ya contaba con una opción más potente en la forma del motor 2.0 TSI de 200 CV. El único motor que ahora necesita el Kuga es un gasolina más asequible y económico de unos 130-160 CV.
Vía: carscoop
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