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La prueba de la moneda, recopilación de vídeos

Hace tiempo os mostrábamos un curioso vídeo en el que una moneda de dos euros se mantenía perfectamente erguida sobre el canto, situada directamente encima del motor V12 de de un BMW 850i. Arrancando el motor y acelerándolo hasta las 3.000 rpm la moneda apenas se movía. Los motores V12 tienen un equilibrio entre bancadas que permite que las vibraciones del propulsor sean mínimas, por tanto la suavidad es máxima.

A partir de la publicación de dicho vídeo muchas otras “pruebas de la moneda” han proliferado en Internet, vídeos en los que los dueños de diversos coches intentan demostrar que sus motores son tan equilibrados como el brillante doce cilindros del BMW. A continuación podréis ver una recopilación de esos vídeos, algunos exitosos y otros fallidos. Recordad, si la moneda cae sobre uno de sus lados han fallado y tiene más mérito si se acelera el motor en lugar de dejarlo al ralentí.

Lexus LS400

A finales de los años 80 Lexus se estrenaba en el mercado con el lanzamiento del LS400, una berlina de lujo con un motor 4.0 V8 de 286 CV de potencia. Los ingenieros de Lexus afirmaban haber creado un motor tan suave que se llegó a poner una copa de champán, que permaneció inmóvil sobre el capó del Lexus mientras se aceleraba el motor. Con una moneda el resultado es igual de impresionante, situada sobre el bloque no cae ni siquiera cuando el motor llega al corte de inyección.

Podéis ver el vídeo en este enlace.

BMW 325d

Por todos es sabido que el nivel de vibraciones de un motor alimentado por gasóleo es superior al de un motor de gasolina, con menor relación de compresión. El dueño de un BMW 325d no se ha acobardado ante la teórica debilidad y sitúa una moneda de dos euros de canto sobre el 3.0 de seis cilindros en línea. La moneda se mantiene estable y sólo cae de lado tras un buen rato demostrando la suavidad de funcionamiento del motor.

Peugeot 406 V6

Los motores V6 no son tan suaves como sus hermanos en configuración en línea (L6) y a pesar de ello la moneda se mantiene de canto al ralentí sobre el motor 3.0 de un Peugeot 406. Si el motor se hubiera revolucionado puede que el resultado final fuera diferente.

Audi V8

No consigo identificar el Audi que equipa el típico motor de 4.2 litros de cilindrada, pero por su apariencia parece de algún modelo de los años 90. En cualquier caso el propulsor no consigue que la moneda se mantenga en su lugar durante mucho tiempo debido a las vibraciones. Lo más probable es que la tapa de plástico multiplique las vibraciones.

Opel Vectra B

Uno de los pocos cuatro cilindros que se atreve con la prueba. Este tipo de motores son proclives a las vibraciones debido a su estructura interna pero a pesar de ello un propulsor de gasolina bien afinado podría conseguirlo. Este antiguo Opel Vectra mantiene el tipo por unos segundos pero la moneda cae de lado al poco tiempo.

Extra lap (Motor 1.6 TDCi)

Los motores diésel de cuatro cilindros, por muy refinados que sean, van a tener un mayor nivel de vibraciones que sus homólogos en gasolina simplemente por su modo de funcionamiento. ¿Qué pasa si situamos una moneda sobre el motor 1.6 TDCi/HDi del Grupo Ford y PSA? Los resultados hablan por sí solos.

En Diariomotor: BMW 850i y la prueba de la moneda, vídeo

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Sergio Álvarez

Aunque es técnico en comercio internacional de formación, los coches han sido su pasión (incluso obsesión) desde que apenas levantaba un metro del suelo y sus padres le regalaron un Ferrari rojo a pedales. Su afición se ha profesionalizado en Diariomotor, donde está presente desde 2008. Seguir leyendo...

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