El preparador Marangoni acaba de enseñar su más que personal interpretación del Alfa Romeo Mi.To, el utilitario de tres puertas con el que la marca alemana tiene la intención de recobrar la confianza de los que buscan un diseño más logrado en sus vehículos. El trabajo de esta curiosa firma se denomina M430 y no tiene nada que ver con ningún Ferrari aunque con su radicalismo pudiera parecerse a alguno. El Essen Motor Show ha sido el perfecto lugar elegido para su presentación.
Resulta difícil comenzar por una parte porque la preparación es completísima, casi no deja ningún reducto original sobre el Mi.To. Comenzando por la parte exterior, el pintado de la carrocería se basa en el clásico blanco del Mi.To con una parte superior en rojo, con el original diseño de marca de neumáticos sobre el capó. Éste tiene marcas de gomas y las propias gomas cambian de color, haciéndose de color rojo a juego con el negro impoluto de las llantas de aleación en 18” que tienen un cierto aire a las del Opel Astra OPC. Las cuatro ópticas principales obtienen además una cubierta de la fibra más “tuning”.
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La parte externa todavía da mucho más juego, pues hay mucho de qué hablar a la hora de citar las defensas. En el eje frontal los dos enrejados característicos de toma de aire se abomban y crecen, incluyendo parte del interior en fibra de carbono. De este mismo “mágico” material está fabricado el gran difusor, que se “pasa por la piedra” al del mismísimo Ford Focus RS y suma nada menos que cuatro salidas de escape a la zaga. Además de pequeñas pegatinas, cuentan con dos pequeñas chapas en rojo y con “marcas” de neumático en la parrilla y en el portón.
El interior es todavía más espectacular y llamativo si cabe. Para empezar, porque antes de entrar tienes que abrir la puerta hacia arriba como si abrieras una tijera. Y lo primero que se encuentra uno es unos asientos en negro con un interior en rojo pulido y la bandera italiana en terminación brillante en una de las hombreras. Ese color pasión se repite adornando los embellecedores de las puertas y ese mismo tricolor del país de la bota aparece en las originales alfombrillas. Pedales metalizados, fibra de carbono para el salpicadero y pomo brillante para el freno de mano completan el habitáculo.
En temas de rendimiento, Marangoni no se queda para nada corto. El motor elegido es el gasolina 1.4 litros T-Jet de 155 CV al que se le han apretado un poco más “las tuercas” para redondear la cifra hasta los 220 CV, convirtiéndolo casi casi en el modelo GTA. Para mantener este salto de potencia bajo control, se instala una suspensión que reduce la altura del Mi.To en 4 cm y se incorpora un sistema de freno con pinzas de mayor calibre y discos redimensionados y perforados.
¿Qué se puede decir ante semejante trabajo? Perfecto para el circuito y para enseñar en una concentración, pero fuera de esos lugares puedes ser tachado de extremista. Y además dejarte los bajos en cualquier entrada de garaje.
Alfa Romeo Mi.To Marangoni M430.
Alfa Romeo Mi.To.
Vía: autoblog.it
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