Junto al Jaguar XF-R una de las novedades presentadas por Jaguar este año ha sido el lavado de cara al que se ha sometido su coupé de lujo XK. Los cambios son principalmente estéticos pero hay novedades mecánicas de importancia, en la forma del abandono de los dos motores 4.2 V8 existentes e instalación de dos unidades de nueva factura. Pero analizaremos esa parte con detalle más tarde, centrémonos por el momento en los cambios visuales, relativos a carrocería y habitáculo.
A primer vista, los cambios estéticos se centran en el frontal, que recibe un aspecto rejuvenecido gracias a unas pequeñas tomas laterales de aire. La trasera del deportivo estrena grupos ópticos, de forma similar a los ya existentes pero equipados con tecnología LED para una mejor visibilidad y duración del elemento. Se instalan también intermitentes en los espejos retrovisores. Las diferencias entre los XK y XKR se centran en algunos cromados de la calandra, y carrocería, así como los tubos de escape, contando el último con cuatro colas.
El habitáculo recibe materiales de una calidad aún más elevada, pero su diseño general apenas varía. Mantiene un aspecto deportivo y señorial al mismo tiempo, siendo personalizables las molduras y asientos con todo tipo de cueros y elementos como la madera de nogal o auténtico aluminio pulido. La instrumentación recibe una retroiluminación blanca y el volante un nuevo forrado pero sin duda el mayor cambio es la sustitución de la palanca del cambio automático y su tradicional recorrido en forma de “J”.
A cambio, se instala el Jaguar Drive Selector, una elegante ruleta estrenada en el XF que emerge de la consola y suple las funciones de una palanca tradicional. Un navegador GPS con conectividad Bluetooth y auxiliar de audio es de serie en toda la gama. En el XKR son de serie asientos de cuero con 10 movimientos de ajuste, refrigerados y calefactados. Con el paquete opcional “R” se obtienen costuras rojas en los asientos de cuero negro y ajustes para las butacas delanteras de hasta 16 vías.
En cuanto a motorizaciones, aparecen en escena dos nuevos 5.0 V8 de inyección directa, uno de ellos de aspiración atmosférica y otro sobrealimentado por un compresor. Empecemos por el primero, cuenta con una potencia máxima de 385 CV y un par de 515 Nm y sustituye al anticuado 4.2 V8 atmosférico. A pesar de entregar más potencia y tener más cilindrada emite 264 g/km y consume de media 11.2 l/100 km, lo que a pesar de ser una cifra elevada es menor que el consumo de por ejemplo un Mercedes SL500.
Con este propulsor el XK acelera hasta los 100 km/h en 5.5 segundos – 0.7 segundos más rápido que su predecesor – y no cesa su empuje hasta los 250 km/h, cuando el limitador electrónico de velocidad actúa. Para el XKR se ha instalado el mismo motor del Jaguar XF-R, un 5.0 V8 sobrealimentado que entrega la enorme cifra de 510 CV y un par máximo de 625 Nm. Es lógico que por tanto mejore el 0 – 100 km/h del XKR 4.2 V8 Supercharged, cifrándose en unos espectaculares 4.8 segundos.
Un coche así no es la elección ideal para los amantes de la conducción eficiente pero incluso un superdeportivo de semejante calibre debería contaminar lo menos posible. Jaguar afirma que el consumo medio del nuevo XKR es de 12.3 l/100 km, con unas emisiones medias de CO2 de 292 g/km recorrido. No es ningún Prius pero mejora el consumo del XKR previo y es un 17% más respetuoso con el planeta que un BMW M6 de igual cilindrada y potencia en cuanto a emisiones.
La potencia pasa a las ruedas traseras del Jaguar a través de una nueva caja automática de seis velocidades ZF 6HP28. Esta caja es controlable en modo secuencial mediante levas en el volante o vía el Jaguar Drive Selector. Sumándose a uno de los chasis más efectivos del mercado, en el Jaguar XK-R se integra de serie un diferencial autoblocante electrónico que quita potencia o frena ligeramente la rueda que en una curva está perdiendo tracción, mejorando el comportamiento del deportivo.
Además es de serie en todos los XK un sistema denominado Adaptive Dynamics, que coordina el control de estabilidad dinámico y la suspensión electrónica adaptativa para ofrecer al conductor la mejor experiencia al volante. Por ejemplo, si el conductor elige el modo Dynamic la respuesta de dirección y acelerador será muy inmediata y el ESP permitirá algún que otro derrape en curva. Por el contrario el modo Winter suaviza y retarda la respuesta del vehículo, permitiendo un mejor control en superficies deslizantes.
Como vemos la seguridad de sus clientes es importante para Jaguar, y por tanto a todos aquellos que instalen en sus XK un sistema de control de crucero adaptativo verán incluido en el paquete un sistema de frenada de emergencia pre-colisión. Si el coche detecta que vamos a chocar con el coche al que precedemos aplicará los frenos y si el choque es inevitable pone en guardia todos los sistemas de seguridad, precargándolos para la mejor respuesta posible.
Como último apunte y a la espera de los precios de los Jaguar XK, XK Portfolio y XKR una curiosidad. Los XK pesan unos 1.650 kg de media gracias al intensivo empleo del aluminio en carrocería y chasis, rivales como directos como el BMW M6 superan las dos toneladas en su versión descapotable, tal y como hace otro rival directo, el Mercedes SL63 AMG.
(*) Actualización 10/1/2011: añadidos los precios del Jaguar XK en enero de 2011.
Jaguar XK 5.0 V8 385 CV Coupé – 102.150 euros
Jaguar XK 5.0 V8 385 CV Convertible – 111.400 euros
Jaguar XK 5.0 V8 385 CV Portfolio Coupé – 111.200 euros
Jaguar XK 5.0 V8 385 CV Portfolio Convertible – 112.450 euros
Jaguar XKR 5.0 V8 510 CV Coupé – 118.700 euros
Jaguar XKR 5.0 V8 510 CV Convertible – 127.950 euros
Jaguar XK 2009
Vía: autoblog
En Diariomotor: Jaguar XK60 Special Edition, Jaguar XKR Portfolio, Jaguar XF-R, la nueva superberlina británica de 510 CV