La temporada 2009 de la Fórmula 1 tiene todos los ingredientes para conseguir tenernos sentados en el borde del sofá durante buena parte de la carrera. Lewis Hamilton tendrá que defender su título a los mandos de un monoplaza que cumple normativas muy distintas a las del año pasado.
Hagamos un pequeño repaso de los principales cambios que han sufrido las máquinas de competición más avanzadas del planeta para esta temporada. Lo que primero salta a la vista en los nuevos coches es la ausencia de todos los apéndices aerodinámicos presentes en la pasada temporada, con esto se consigue un diseño más limpio, pero también se reduce el agarre y la velocidad en las curvas rápidas. El alerón trasero es más estrecho y alto, mientras que el delantero puede ser regulado hasta seis grados por el piloto un máximo de dos veces por vuelta.
La gran introducción en el campo tecnológico viene con el KERS, o sistema de recuperación de energía cinética, que acumula parte de la energía del frenado y la usa más adelante para acelerar el coche. La energía podrá ser almacenada en una batería, en supercondensadores o volantes de inercia. El aumento de energía equivale a unos 80 CV y puede ser activado por el piloto durante un máximo de 6.6 segundos por vuelta. Pero no todo son buenas noticias con el KERS, su ubicación en la base del depósito de combustible reduce la capacidad del mismo en unos 15 kg lo que afectará a las estrategias de repostaje.
Los más nostálgicos, entre los que me incluyo, se alegrarán de la vuelta de los neumáticos lisos o “slick” prohibidos en 1997, que harán más crucial si cabe la tarea de predicción meteorológica. Resumiendo, lo que se ha intentado es aportar más emoción a las carreras, algo que en temporadas pasadas ha estado ausente durante demasiados grandes premios.
No todas las escuderías han desvelado todavía sus actualizados monoplazas, pero los principales candidatos al título ya lo han hecho. Red Bull presentará su RB5 el día 9 de febrero, rompiendo así la tendencia del resto de equipos, que presentaron sus coches con pocos días de separación.
Empecemos por El BMW F1.09, la suerte de BMW ha sido diversa en las últimas temporadas, aunque parece ir mejorando. Robert Kubica será quien tenga todo el peso sobre sus hombros, tras finalizar cuarto empatado a puntos con Kimi Räikkönen la temporada pasada. Su compañero Nick Heidfeld intentará mejorar su sexto puesto, a un punto de distancia del siempre espectacular Fernando Alonso.
Ferrari presentaba su F60 en el circuito de Mugello tras un cambio de ubicación de última hora por la malas condiciones meteorológicas en Maranello. El encargado de presentar al monoplaza número 55 de Ferrari para la Fórmula 1 fue Felippe Massa, subcampeón de la pasada temporada. Ferrari nunca se puede subestimar, aunque este año tendrá que hacer un esfuerzo extra para arrebatarle el título a McLaren con unos pilotos que no acaban de cuajar entre los “tifosi”.
No hay ningún tipo de duda a cerca de que el Mclaren MP4-24 será el rival a batir en este nuevo año, y gran parte de la prensa especializada ya lo da como favorito. Detrás del volante de este monoplaza estará el actual campeón Lewis Hamilton, para ayudarle en esta ardua tarea Heikki Kovalainen tendrá en sus manos el volante de la segunda “bala de plata”. Pedro de la Rosa mantiene su labor de probador tras la partida de Ron Dennis como jefe de equipo, Martin Whitmarsh será quien le suceda en el puesto.
La escudería que nunca acaba de arrancar a pesar de ser el mayor fabricante mundial de automóviles es Toyota, razón por la cual han depositado todas sus esperanzas en un renovado TF109. Jarno Trulli y Timo Glock se encuentran ante una situación favorable y podrían dar la sorpresa si los demás equipos no tienen un buen arranque de temporada. En su contra se encuentran la poca regularidad de Trulli, capaz de lo mejor y de lo peor, y la escasa competitividad del coche en pasadas temporadas.
Con un prometedor segundo mejor tiempo en los primeros entrenamientos del año arrancaba el Williams FW31, que por tercer año consecutivo monta motor Toyota. La escudería de Frank Williams confía una vez más en Nico Rosberg y Kazuki Nakajima, que han permanecido durante toda su carrera en la F1 en la escudería británica. Más hambrienta de título que nunca Williams intentará conseguir un título que no toca desde el año 1997, cuando estaba aliada con Renault.
Para finalizar tenemos al Renault R29, con el carismático Fernando Alonso a los mandos. El de Renault ha sido el coche con un arranque menos prometedor, inicialmente no lograba pasar las pruebas de choque y sus tiempos en los primeros entrenamientos no han sido precisamente excelentes, aunque ya se sabe que los tiempos de estas primeras tomas de contacto hay que tomarlos con mucha cautela. De todos modos si hay algo en lo que la escudería francesa es especialista es de sacar provecho a un coche limitado.
Finalizamos así este breve repaso a las normativas y los coches que competirán este año en el circo de la Fórmula 1. Sólo el tiempo dirá si tantos cambios lograrán más adelantamientos en la pista, en lugar de los boxes, y si se conseguirá una mayor igualdad entre las distintas escuderías. Os mantendremos informados de las novedades en esta siempre apasionante competición.
Los Fórmula 1 de la temporada 2009
Vía: F1 Fanatic
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