La crisis se lleva una víctima más, en este caso el mítico carrocero germano Karmann, que llevaba produciendo y carrozando vehículos desde hacía 108 años. Los motivos son claros, un alarmante descenso de los pedidos y un porvenir incierto debido al decreciente número de fabricantes que acudían a Karmann para producir sus vehículos. La empresa alemana se dedicaba fundamentalmente a producir descapotables y componentes de capotas/techos duros retráctiles para algunos productores europeos de coches.
El lunes pasado un Mercedes CLK 200 Kompressor salía de las líneas de producción, marcando el final del camino para Karmann. Actualmente sólo producía completamente el Mercedes CLK Cabrio pero en su día produjo también el Audi A4 descapotable, el Volkswagen New Beetle Cabrio y los módulos de techo de Bentley Continental GTC, Chrysler Sebring Cabrio, Renault Mégane CC o Nissan Micra C+C. Muchos fabricantes con exceso de capacidad prefieren ahora producir por sí mismos dichos elementos.
Es una de las razones por las que Karmann se ha quedado prácticamente sin cartera de clientes, mismamente Mercedes fabricará en sus factorías el sucesor del CLK Cabrio, el Clase E Cabriolet. Los 2.240 trabajadores de la empresa ya han sido notificados, y desgraciadamente perderán sus cotizaciones al plan de pensiones de la empresa. Todo indica que no habrá una reestructuración, simplemente una liquidación y venta de activos a los acreedores, debido a desacuerdos entre sindicatos y gestión de la empresa.
Tras 3.3 millones de vehículos producidos en todos sus años de existencia llegamos a un triste final para una empresa que produjo vehículos tan preciosos como el Volkswagen Karmann Ghia Coupé. Diseñado por el gabinete italiano de Ghia, este coupé – que tuvo una versión descapotable – tomaba al Volkswagen Escarabajo como base mecánica, con sus motores bóxer de hasta 60 CV de potencia. Fue reemplazado por el Porsche 914 y a día de hoy empieza a cotizarse como una pieza de coleccionista.
Vía: Autoblog
En Diariomotor: General Motors se declara en bancarrota, Porsche evitó la bancarrota por un margen de tres días, Magna International se quedará con Opel y Vauxhall