El nuevo Citroën C3 se ha dejado ver por un pase privado para distribuidores y de ahí han surgido estas fotografías espía que dejan al próximo utilitario francés de cinco puertas bastante al descubierto. La presentación oficial debería llegar en el mes de septiembre en el Salón de Frankfurt y posteriormente su venta antes de que llegue el mes de marzo del próximo año. De momento, este adelanto de detalles.
El lavado de cara del C3 es más que pronunciado y sigue de una forma clara las líneas de diseño anticipadas en el DS3, una versión de tres puertas que se situará en un escalón superior. El nuevo C3 cuenta con un frontal más suave en el que se integran en longitud las ópticas aunque lo que más destaca es el trapezoide formado por la parrilla y la el receptor de aire principal. El chevron brilla más que nunca con un acabado cromado que también aparece en la parte trasera.
No hay casi similitudes entre la nueva trasera y la actual. El lugar de la matrícula se desplaza hacia el parachoques acogiendo en ese espacio el logo de Citroën y una banda cromada en la base. El portón y la luneta permanecen en un tamaño constante aunque se ven franqueados por unos faros traseros totalmente diferentes. Es un diseño bastante más juvenil y elegante que el que posee el actual C3.
Varios detalles cromados más se extienden incluso a los tiradores de las puertas, que no son los únicos que varían en el nuevo modelo. Los retrovisores exteriores ganan en tamaño copiando un estilo similar al del Peugeot 207. Éstos pueden ir pintados en color negro o en el mismo tono de la carrocería, como el gris Artic Steel, el blanco Polar o el negro Obsidian que vemos en las fotos. En la lista de novedades exteriores también están las nuevas llantas de aleación, bastante sencillas dentro de lo que cabe.
En estas imágenes no aparece el interior con claridad aunque se comenta que tendrá ciertas reminiscencias con el visto en el DS3. Tendrá una consola central bastante más organizada que la actual e incluirá en ella un sencillo control del climatizador. Se comenta además que habrá distintos añadidos en forma de inserciones metalizadas.
Sobre los motores parece que no habrá sorpresas y se mantendrán los actuales, al menos al principio de su comercialización: desde los 58 CV del 1.1 gasolina hasta los 108 CV del 1.6 HDi diésel. Es de esperar más adelante motores de más calibre, incluyendo los gasolina turbo de 1.6 litros, y las transmisiones automáticas. Entra dentro de lo posible que se incluye el sistema de arranque y parada del motor.
Lo que se sabe es que en los planes de Citroën entra el mantener la actual generación en producción de forma simultánea al lanzamiento de este nuevo modelo. Hasta septiembre seguramente vayamos obteniendo más datos.
Vía: worldcarfans
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