En nuestra sociedad de consumo nos gusta hacer las cosas rápido, de manera eficiente. Restaurantes de comida rápida, servicios express de paquetería y por supuesto lavados rápidos para nuestros coches. Unos franceses alemanes han decidido emplear la fuerza bruta para lavar su familiar, sabiendo que de por medio hay maquinaria pesada podemos ir oliéndonos que no todo va a salir tan bien como se espera. Todo forma parte de un programa para una cadena de televisión.
Para lavar el coche han llenado de agua la pala de una enorme excavadora Liebherr, nada menos que una R 9800, el tope de gama en vehículos con cadenas. Este monstruo pesa 804 toneladas y lleva dos motores diésel, de 2.000 CV de potencia cada uno. La pala – o el caldero – puede contener 42 metros cúbicos de materiales. La cantidad de agua que cae sobre el coche son 10.000 litros, unas 10 toneladas aproximadamente, unas 10 veces el peso del vehículo.
Tras el salto el vídeo.
Como habéis podido comprobar, no es la solución más efectiva, el coche ha quedado para el desguace. Siniestro total no, lo siguiente. Recordad, si queréis lavar el coche, no acudáis al amigo que trabaja en la cantera, id mejor a un túnel de lavado (o no).
(*) Actualización: Añadimos un vídeo del programa alemán para el que se grabaron estas escenas. La calidad es mucho mejor y se puede ver antes el efecto de 1.000 litros de agua sobre el coche, con una excavadora pequeña. Gracias a ayaya por el enlace.
Vía: Jalopnik
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