La nueva generación del Citroën C3 está muy próxima a su definitivo lanzamiento comercial y la marca francesa ha puesto muchas expectativas en él. Algo totalmente normal, ya que confirma el gran paso adelante en calidades, equipamiento o imagen que ha dado el utilitario polivalente respecto a la generación precedente, una situación muy parecida a la que ya vimos en su día con el Citroën C5. Habrá que ver si todas estas expectativas se traducen definitivamente en éxito comercial (y también en una tarifa de precios que acompañe), pero desde luego la base es buena.
El nuevo C3 se fabrica en las plantas de Aulnay y Poissy en Francia, y estará a la venta desde Noviembre de 2009. Presume de un diseño bastante logrado y atractivo, posibilidades de equipamiento hasta ahora no demasiado frecuentes en el segmento, un interior que (al menos en sus versiones más altas de gama) entra por los ojos y una gama de motores amplia y eficiente. Estará disponible con motores de gasolina 1.1, 1.4, 1.4 VTI de 95 CV y 1.6 VTI de 120 CV y con los omnipresentes diésel HDi 1.4 de 70 CV y 1.6 de 90 y 110 CV FAP. Todos los diésel homologan emisiones de CO2 menores de 120 gramos por kilómetro.
El Citroën C3 de primera generación, que sigue por el momento a la venta si bien con una disponibilidad reducida de motores y acabados, fue un relativo éxito para la marca. Más de dos millones de unidades vendidas lo avalan, pero no nos engañemos, siempre ha sido un coche bastante discutido en términos de calidad o estética y últimamente su principal aval para vender ha sido su competitivo precio, ya que su veteranía en el resto de aspectos era un duro lastre. Ahora el nuevo C3 apuesta por un salto evidente en todos los aspectos: calidad, diseño, motores, equipamiento, y probablemente también en precio, al menos ligeramente.
Una de sus armas es su mayor habitabilidad y espacio interior. Sus dimensiones han crecido, llegando a los 3.94 metros de largo, 1.73 metros de ancho y 1.52 metros de alto, muy cercanas a las medidas de los compactos de hace algo más de una década, aunque ligeramente inferiores a las de algunos rivales actuales que superan por poco los cuatro metros de longitud. Tiene un diámetro de giro de 10.2 metros, lo cual es algo muy útil para entorno urbano o a la hora de aparcar.
En esa sensación de espacio y luminosidad interior tiene mucho que decir el parabrisas Zenith, un parabrisas panorámico de 1.35 metros de longitud que aumenta la visibilidad superior de los pasajeros delanteros. Su parte superior está tratada con un tintado progresivo de 25 centímetros, para ofrecer protección solar en la parte delantera y no molestar en exceso en los días calurosos. Según la propia Citroën, el parabrisas Zénith ofrece una experiencia Visiodrive, ofreciendo nuevas sensaciones y una mayor inmersión con el entorno durante la conducción. Un poco exagerado, quizás, y un nombre muy comercial, pero sin duda tiene su atractivo.
El diseño y el estilo del nuevo C3 destaca en un primer vistazo. Comparado con su antecesor, conserva la simpatía en sus formas y un perfil lateral arqueado, en forma de “huevo”, pero seguramente sus nuevas formas, más adultas y dinámicas, suscitarán más unanimidad. El frontal es mucho más moderno y estrena el nuevo logo de Citroën, con los chevrones más suavizados en sus formas. Se podrá elegir entre diez colores distintos y sus accesorios exteriores serán mucho más aspiracionales y darán sensación de más coche: a ello contribuyen las llantas de aleación, disponibles en medida desde 15 hasta 17 pulgadas, o los cromados en los tiradores de las puertas y la línea de los marcos de las ventanillas.
Personalmente, lo que más me llama la atención es su interior, con una instrumentación que incorpora dos esferas analógicas y una pantalla LED digital, y unas formas en salpicadero y consola central que beben directamente del Citroën DS3 y se aproximan un poco más a sus rivales más logrados, incluso con ciertas aspiraciones premium. La marca promete ajustes logrados y materiales de calidad, como un el salpicadero conformado térmicamente y adornado con una moldura de color gris satinado o de aluminio cepillado, o una atractiva consola central con un lacado en negro brillante que veremos si no será demasiado manchadiza y delicada con el paso del tiempo.
Su maletero homologa un volumen de 300 litros, en la media del segmento, y puede contar con cuatro argollas de sujección y una red móvil para evitar el desplazamiento indeseado de los objetos. Los asientos traseros son abatibles con un sólo movimiento desde las puertas traseras o desde el mismo maletero, con posibilidad de fraccionarse según el habitual 60/40, ampliando así drásticamente su capacidad. En el interior cuenta además con una guantera de 13 litros, y puede incorporar reposabrazos con doble hueco o un cajón deslizante bajo el asiento del pasajero.
El equipamiento incide sobre todo en los sistemas multimedia. Además de los elementos más habituales, puede incluir un equipo de sonido denominado HiFi System (con amplificador de graves en el maletero), conector USB Connecting Box sistema de manos libres Bluetooth con AD2P para poder transferir música o navegador en color MyWay.
En lo relativo a la mecánica, el nuevo C3 está mucho mejor aislado que el anterior, gracias a la mayor presencia de material insonorizante y nuevas juntas de goma, por lo que el confort y la ausencia de vibraciones y ruido en el habitáculo debería haber sido bastante mejorados. Sin embargo, se ha procurado contener el peso total del conjunto y buscar una buena aerodinámica, con un coeficiente Cx de 0.30, para conseguir unos buenos consumos. Como es habitual en el segmento, tiene un eje trasero torsional, y estrena una nueva dirección asistida eléctrica con asistencia variable.
Los motores de gasolina son los ya conocidos 1.1, 1.4 y los 1.4 VTI de 95 CV y 1.6 VTI de 120 CV, qestos últimos también montados por Mini y diseñados en conjunto por PSA y BMW. Homologan emisiones entre 134 y 160 gramos de CO2 por kilómetro, y cumplen la normativa Euro V. Todos equipan caja de cambios manual de cinco velocidades, aunque el 1.6 VTI estará disponible con una caja opcional automática de cuatro relaciones. Echamos en falta versiones más potentes como el 1.6 THP de 150 CV, que puede que se incorporen más adelante o simplemente sean exclusivas para el Citroën DS3.
Los diésel probablemente continuarán siendo los más vendidos, por su equilibrio entre prestaciones y consumos. El motor 1.6 HDi FAP de 90 CV homologa tan sólo 99 gramos de CO2 por kilómetro, y será uno de los motores estrella de la gama actual. Las otras dos versiones con los también conocidos 1.4 HDi de 70 CV y 1.6 HDi de 110 CV.
Todos los motores incorporan un indicador de cambio de marcha recomendada en la instrumentación, y se espera que para el año 2011 lleguen nuevos motores gasolina de tres cilindros, así como un sistema Start & Stop de segunda generación. De serie, el C3 incorpora el obligatorio ABS, repartidor electrónico de frenada REF y asistente a la frenada de emergencia AFU, pero el control de estabilidad ESP casi con total seguridad no será de serie en todas las versiones como sí ocurre en los Seat Ibiza o Volkswagen Polo, seguramente para abaratar las versiones más básicas, aunque sí estará disponible como opción en esos casos.
En cuanto a la seguridad pasiva, es uno de los pocos turismos diseñados recientemente que no consigue las cada vez más habituales cinco estrellas EuroNCAP. El nuevo Citroën C3 se conforma con cuatro estrellas EuroNCAP, lo cual no quiere decir que sea un coche inseguro, ni mucho menos. Su puntuación se debe en buena parte a los bajos resultados obtenidos en la protección a peatones y en los sistemas de seguridad de serie (al ser el ESP opcional en las versiones más básicas).
Citroën C3 2010
Vía: Citroën
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