Después de cuatro años en el mercado, el Fiat Grande Punto sufre una remodelación que casi lo convierte en un nuevo modelo, aunque manteniendo sus señas de identidad básicas. El Fiat Punto Evo todavía se hará esperar un poco para su comercialización en los concesionarios de la firma italiana, pero está presente en el Salón de Frankfurt para su presentación mundial en sociedad, y aspira a seguir reeditando éxitos una temporada más.
Destacan en el Punto Evo, además de su rediseño bastante profundo, los nuevos motores 1.4 Multiair, que ya ha estrenado su primo el Alfa Mi.To. Prometen mejores prestaciones que los anteriores junto a consumos más reducidos, tanto en el atmosférico de 105 CV como en el turboalimentado de 135 CV. En diésel los Multijet continuarán presentes con los motores 1.3 de 75 y 95 CV, junto al más reciente 1.6 litros.
El diseño exterior ha sufrido una profunda evolución, como indica el propio nombre del modelo, adaptándose a los nuevos tiempos. Los faros delanteros reciben una carcasa oscurecida y cambian ligeramente su forma, mientras que recibe una nueva parrilla con un listón cromado. El frontal que tanto destacaba en el Grande Punto anterior se sustituye por una toma de aire en una situación ligeramente más baja y cruzada por una gran banda en plástico negro, al más puro estilo de los últimos Peugeot.
Personalmente, creo que este detalle le hace ser más práctico y menos delicado ante los pequeños roces de aparcamiento, por ejemplo, pero también le hace perder esa estética tan agraciada y las líneas tan limpias que tenía el Grande Punto, vulgarizándolo en cierta manera.
Desde la vista lateral, en su perfil apenas se aprecian cambios, salvo la aparición de una moldura que recorre el lateral de forma longitudinal: volvemos a lo mismo, más práctico, pero peor estética. Las llantas lucen nuevos diseños, y también en la parte trasera se dan más cambios, con unas ópticas con luces LED bastante reformadas.
El paragolpes trasero también recibe una banda transversal, sin pintar, en la zona donde va ubicada la matrícula, y vemos la nueva tipografía de la denominación Punto, abandonando la coletilla de “Grande“.
En el interior están algunos de los cambios más jugosos. Se renueva totalmente el salpicadero, la instrumentación, la consola central y los paneles de las puertas, inspirándose los nuevos elementos en el diseño del Fiat Bravo.
De hecho, salvo por la distinta escala, elementos como la banda central que recorre el salpicadero, los aireadores centrales, el volante multifunción o el módulo de climatización nos dejan con una sensación de familiaridad absoluta con el Fiat Bravo, aunque la ergonomía parece que todavía se puede mejorar un poco. Por contra, la apariencia del interior transmite sensación de buena calidad.
Fiat Punto Evo en Frankfurt 2009
En Diariomotor: Fiat Punto Evo | Tecnología para motores Fiat Multiair
