El cambio de enfoque que Seat quiso aplicar al Seat Toledo hace cinco años no tuvo el efecto esperado, con el cambio a una carrocería más cerca de lo que asociaríamos con un monovolumen que con una berlina, muchos auguraban el fracaso de ese modelo. Así que Seat ha decidido poner punto y final a las andanzas de un modelo que comenzaron a fabricar en el año 1991 y que termina con su tercera versión.
La fabrica de Martorell ya no verá salir por sus puertas ni una sola unidad más del Toledo III y las últimas que lo hicieron antes del verano fueron destinadas a la Guardia Urbana de Barcelona, cuerpo que dispone de más de 200 unidades de este coche. Las cifras de ventas no prometían, de las 40.162 unidades vendidas en el año 2002 se pasaron a tan sólo 4.820 en 2008 y si miramos las ventas de este mismo agosto nos encontramos a cuatro solitarias unidades vendidas.
Para agravar la situación del Toledo, la aparición del Altea XL significaba uno de los mayores casos de canibalismo en la marca española que se pueda recordar. Y la puntilla vino de lo que muchos consideran que es el verdadero Toledo, el Seat Exeo, que satisface las necesidades de los que querían una berlina media y tiene además el extra de haber sido un modelo que Audi comercializaba como A4.
Con una producción tan baja, no salía económico mantener la producción de este, así que la carrera que en principio iba a durar hasta el año 2012 termina de forma abrupta en 2009. Pocos echarán de menos al Toledo III, pero puede que Seat le conceda una nueva oportunidad a un modelo totalmente maltratado por su rediseño y podamos ver un totalmente renovado Toledo IV por nuestras carreteras.
Vía: El Periódico
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