La Navidad está muy cerca, las luces en las calles, las compras frenéticas en los centros comerciales… todo anticipa agradables reuniones familiares, regalos y banquetes por doquier. El árbol de Navidad no puede faltar en estas fiestas. En ocasiones se recurre a árboles de plástico o decoración de plantas ya existentes, pero en otros compramos un árbol natural para la ocasión, en la mayoría de casos un pino. En países centroeuropeos como Alemania esta solución es muy popular.
Estos pinos naturales pesan unos 30 kg, y transportarlos desde el punto de compra hasta nuestra casa puede ser complicado. En algunos coches el maletero es demasiado pequeño y hay que transportarlo en la baca. El ADAC, el prestigioso instituto alemán independiente dedicado a la seguridad vial, ha realizado dos crash-test con árbol de Navidad incluido. En el primero de ellos, se sujetaba un pino de 32 kg a los raíles del techo con los tradicionales pulpos elásticos, la solución más típica para estos menesteres.
El vehículo de prueba estaba sujeto a una plataforma móvil que se detiene bruscamente al finalizar su raíl, simulando una colisión frontal. El resultado es claro, el árbol rompe las cuerdas elásticas que lo sujetan y sale propulsado a 50 km/h hacia delante, con una fuerza de 750 kg. No resulta difícil imaginarse el peligro que puede suponer en un accidente real, incluso en un frenazo brusco podría haber problemas. A continuación repiten el experimento pero afianzando el árbol convenientemente a la baca.
Lo hacen mediante unas grandes correas de trinquete, similares a las que sujetan la carga de los camiones, aseguradas con “carracas” metálicas. Al someterse a la brusca deceleración el vegetal apenas se mueve. Queda por tanto demostrada la mejor manera de cargar no sólo un árbol, sino cualquier bulto voluminoso en el techo de nuestro coche. ADAC también resalta que si lo transportamos en el maletero y sobresale, hay que señalizarlo debidamente con un banderín o un trozo de tela de color rojo.
Vía: Autoblog.nl -> ADAC
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