Espero que este año os hayáis portado bien, porque en unos horas los Reyes Magos llegarán cargados de regalos para algunos y carbón para otros. Grandes y pequeños esperamos el día con ilusión y puede que alguno reciba un coche, bien una miniatura o bien uno bien grande y funcional. En cualquier caso, estoy seguro de que en vuestra carta a sus Majestades de Oriente siempre ha estado ese deportivo o un todoterreno para hacerse unas buenas escapadas por los montes.
Por supuesto, los señores Reyes Magos tienen un presupuesto que se ajusta a cada persona, pero, que demonios, echemos un poco a volar la imaginación. Nos salimos un poco de la tónica habitual de artículos con una pequeña lista personal de deseos automovilísticos ordenados por precio. Puede sonar extraño y vago ahora mismo, pero sólo se trata de que digáis el coche que elegiríais según ciertas bandas de precio si fuese vuestro regalo de Reyes. ¿Os animáis?
1. Menos de 2.000€
En muchos casos sus Majestades tienen presupuestos ajustados, con lo que sólo se puede optar a pequeños vehículos en el mercado de segunda mano. Pero incluso aquí se puede jugar bastante bien y encontrar buenas ofertas, aunque no coches de ensueño. Por 2.000€ se pueden encontrar bastantes Renault Clio II o Peugeot 206, dos opciones seguras. Para no tener que preocuparte de costes de mantenimiento o averías lo mejor es ir a por un indestructible motor diésel atmosférico, aunque sea lento y vibre como un tractor.
2. Entre 2.000 y 6.000€
El presupuesto puede ser algo superior, aquí yo me iría a por un compacto GTI de antaño. Un Volkswagen Golf II GTI se puede encontrar por este dinero, aunque es necesario verificar su estado. No soy muy amigo de los coches de segunda mano, pero prácticamente nada nuevo te puedes encontrar por ese dinero. Me gusta el Golf GTI por su buen manejo, un motor 1.8 de 112 CV bastante fiable y un peso contenido, que lo hace muy juguetón en las curvas, su terreno de juego.
3. Entre 6.000 y 15.000€
¡Estos Reyes manejan! Dejando a un lado las consideraciones prácticas y la lógica económica no me iría a por un utilitario diésel, sino a por un pequeño exótico de origen japonés. El Daihatsu Copen, un pequeño roadster de menos 3.5 metros de longitud equipado con un motor de gasolina 1.3 de 88 CV de potencia es más rápido de lo que parece gracias a un peso de 850 kg. Muy ágil en curvas y sencillo de aparcar es todo un juguete que le da mil vueltas a un soso Seat Ibiza Ecomotive y su 1.4 TDI.
4. Entre 15.000 y 30.000€
Con estos precios yo les pediría a los reyes un Mazda 3 MPS, sin duda alguna, apurando al límite de los cinco kilos. Para mí es el compacto deportivo más bonito del mercado, sobretodo pintado en el color rojo de las imágenes oficiales. Con un 2.3 turbo de 260 CV bajo el capó tiene unas prestaciones muy serias, no aptas para manos inexpertas si vamos a llevarlo rápido. El interior es muy acogedor y los asientos deportivos son una auténtica gozada. A priori tiene el pedigrí de fiabilidad y prestaciones de Mazda y todos sus predecesores.
5. Entre 30.000 y 60.000€
Muy bien te tienes que haber portado para que te hagan un regalo de semejante valor. Si me viese en la tesitura de elegir un coche-capricho para mí, me iría a algo alemán, con motor bóxer y tracción trasera. Concretamente me iría a por un Porsche Cayman, con el motor 2.9 de acceso a la gama, con un peso de 1.330 kg me sobran y me bastan los 265 CV que tiene. Hay coches con mejor relación calidad-precio, pero su dinámica es legendaria y tiene un status muy superior a un Nissan 370Z, por ejemplo.
6. Entre 60.000 y 200.000€
Entramos en el terreno de los superdeportivos y coches exóticos de todo tipo. La oferta es increíblemente variada, podría comprarme un Nissan GT-R por menos de 88.000€ y dedicarme a humillar Porsches. O comprarme un Porsche 911 Turbo e intentar en vano humillar al Nissan GT-R. Pero no quiero un superdeportivo, sino un cómodo coupé de gran lujo como el Mercedes CL 600. Y lo prefiero antes que un CLS 63 AMG, por un par de razones: 12 cilindros biturbo y 1.000 Nm.
7. Más de 200.000€
Esto significa que eres los Reyes Magos, así que puede que vivas en Dubai (es el Oriente, ¿verdad?) y te puedas permitir cualquier capricho posible. La oferta es aún mayor que antes y el límite no existe, literalmente. Yo me voy a Italia, que aún no he visitado Santa Ágata. Una vez allí les pido por favor un Lamborghini Murcielago LP670-4 SV, en amarillo y con las llantas negras, igual que el de la prueba de nuestro compañero Iván Mula. Sólo de imaginarme el V12 de 6.5 chillando a pleno pulmón me aumentan las pulsaciones.
Es vuestro turno, ¿qué les pedirías a los Reyes según dicha dotación económica? Ah, y Felices Reyes para todos los que nos leéis y comentáis habitualmente, esto no sería posible sin vosotros.