Lotus Elise, ahora con facciones más suaves

Los Lotus Elise son deportivos británicos que harían feliz al mismísimo Colin Chapman si siguiese vivo. El fundador de Lotus fue el abanderado de la frase “quítame un kilo antes de darme un caballo“, con pesos pluma como el Lotus Elan o el Seven original. El Elise, con un peso inferior a la tonelada, sigue manteniendo viva esa filosofía y haciendo felices a los amantes de los deportivos puros y ligeros. Es un coche que destaca por un comportamiento muy dinámico, puede que gracias a su arquitectura de motor central.

Sus motores de origen Toyota desarrollan hasta 220 CV en el Lotus Elise Supercharged, siempre enviados a las ruedas traseras. En el Salón de Ginebra se podrá ver la versión actualizada, que estrena nueva cara gracias a una profunda cirugía estética. En general son formas más redondeadas para las tomas de aire y los faros, que suavizan las facciones del rapidísimo deportivo y estrenan iluminación diurna LED. En la zaga no hay apenas cambios, el difusor es ligeramente más grande, pero los pilotos de freno siguen en su habitual posición.

En cuanto a la técnica, el modelo recibe una actualización aerodinámica que reduce el coeficiente de mismo nombre en un 4%, lo que redunda en emisiones globales inferiores. El modelo de acceso con motor 1.6 atmosférico ve sus emisiones reducidas con respecto al 1.8 anterior en un 13% hasta los 155 g/km de CO₂. El 1.8 del Elise R, con sus 192 CV también atmosféricos se conforman con 196 g/km y el potente Elise SC con 220 CV sobrealimentados tampoco sobrepasa la barrera de los 200 g/km.

Otras opciones incluyen llantas de aleación ultraligera, una caja de cambios de desarrollos muy cortos y por primera vez la opción de instalar control de crucero. En unas semanas tendremos muchos más datos.