El tuning japonés suele dejarnos ejemplos bastante peculiares de lo que se puede hacer con un vehículo, desde camiones cargados de luces y cromados – los extraños dekotora – hasta clásicos con una colección de órganos por tubos de escape. Es un país muy peculiar, donde te podrías encontrar a un amante de los clásicos europeos junto a los que preparan deportivos de última hornada para carreras de drifting. La última tendencia parecen ser las “Dajiban”, furgonetas muy prestacionales y preparadas.
Son furgonetas de la marca Dodge específicamente, modelos Ram 150 y 250 con abundantes mejoras prestacionales y un aspecto muy racing. Llevan motores Magnum V8, montados prácticamente dentro del habitáculo ya de fábrica. Por supuesto, son unidades carburadas pero que reciben componentes de competición para mejorar su rendimiento. Aunque de serie apenas pasasen de 200 CV muy poco apretados, estos maniacos de la competición pueden hacer maravillas con estos 8 cilindros estadounidenses.
El habitáculo de estas furgonetas está completamente destripado y es muy minimalista, generalmente cuenta con asientos deportivos e inserciones varias de fibra de carbono. ¡Quién hubiese pensado que una furgoneta pudiese ser tan atractiva! En la zona de carga a veces se instalan jaulas antivuelco o se dejan completamente vacías, aunque algunos propietarios llevan consigo todo tipo de repuestos o la compra del siglo de la semana. Seguro que con un Mazda RX-7 preparado para drifting no pueden hacer eso.
Y no sólo son vehículos de paseo, la gran afición a la competición que hay en Japón hace que los dueños de estas Ram Van se vayan con frecuencia a circuitos y comiencen a competir por el mejor drift. Tracción trasera y una batalla larga son las condiciones base ideales para ello. Incluso se encuentra en expansión el D-VAN GP, un campeonato paralelo al D1 GP de drifting. En este hilo de VWVortex y en esta web hay muchas más imágenes, pero os adjuntamos una selección tras este párrafo.
Vía: VWVortex, Hooniverse
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