Desde Suiza nos llega el GT600 de BF Performance que es un paquete de mejoras para el Lamborghi Gallardo LP5604, sea el coupé o el descapotable Spyder. Sus creadores dicen que “el Gallardo es demasiado inocente y no es lo suficientemente dinámica e individual”. Y de ahí nace el GT600 que pinta al Gallardo de más agresivo y de paso le recorta unos kilos.
43 kilogramos son los que adelgaza el LP560-4 gracias a que sustituye algunas piezas por otras realizadas en fibra de carbono, de hecho todas las que introduce BF Performance están creadas en este material. Lo que cambia en la carrocería son los laterales, el difusor, el alerón trasero y las puertas, de apertura en forma de tijera. Es justamente en un Lambo donde estás puertas lucen mejor.
De puertas para adentro el LP560-4 es más “competitivo”, para empezar porque lleva unos asientos más deportivos, y menos cómodos de paso, unos cinturones con cinco puntos de sujección y una jaula de seguridad. Si esto no está preparado para correr que alguien me diga lo contrario. La dieta sigue con el intercambio de aireadores, manetas e incluso del volante por otros con un aplique masivo de fibra de carbono.
Los 560 CV del LP5604 no permanecen intactos pero BF Performance no suelta prenda acerca de cuánto ha sido potenciado. Me imagino que al menos 40 CV extra le habrán sacado, sino sería mejor dejar las cosas tal cual estaban. El caso es que afirman que, con el V10 modificado y la breve dieta, el LP5604 acelera más rápido que el LP6404 SV. No está mal aunque estaría mejor si fuese capaz de superar al LP670-4 SV. La cosa debe de ir en serio porque el GT600 cuenta con frenos carbocerámicos, que no son precisamente para ir a buscar a los niños a la escuela.
BF Performance pone a la venta el kit del GT600 y añade un extra posible que puede interesarle a muchos: deshacerse de la tracción a las cuatro ruedas y trasladar toda la potencia, de forma permanente, a las ruedas traseras. Esto también va por el camino de ser más agresivo, ¿no? El tema es que el gran aliciente del LP 560-4 es precisamente la transmisión integral.
Si querían irse al lado más radical podían haberse aliado con Underground Racing para potenciar el Gallardo hasta los 1.500 CV. O igual eso es pasarse un poco. BF Performance le quita peso al LP560-4 y le da una personalidad distinta con una capacidad superior para afrontar el circuito.
BF Performance Lamborghini Gallardo GT600
Vía: worldcarfans
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