La historia parece sacada de una película de gangsters o de algún episodio de Los Soprano, donde el protagonista orquesta un golpe para hacerse con un cargamento de automóviles que acaban de llegar al puerto. Pero una vez más la realidad supera la ficción, y esta semana nos enterábamos de que seis vehículos BMW preparados para el pasado Salón de Nueva York, habían sido robados mucho antes de que éstos pudieran exponerse.
Los malhechores se enteraron de alguna forma de que varios BMW se encontraban en la zona de carga del Puerto de Nueva Jersey. Asaltaron los contenedores y se hicieron algunos vehículos, entre los que se encontraba uno de los nuevos BMW 550i con acabado de pintura Sophisto Grey cuyo color aún no se ofrece en el catálogo de Estados Unidos. Por lo que desde el 13 de marzo alguien se estará paseando con un BMW de 90.000$ muy exclusivo.
A parte del 550i se llevaron un BMW 535i xDrive (más de 52.000$) y un BMW 650i (más de 80.000$). Al fin y al cabo, un buen botín, pero para ellos no fue suficiente. Un par de días después regresaban para completar el trabajo y llevarse el más gordo de todos, todo un BMW 750 Li xDrive valorado en más de 100.000$.
Por si no fuera poco también se les atribuye un robo sucedido una semana después en unos almacenes de BMW en Elisabeth, cerca de la ciudad de Nueva Jersey. En fin, el golpe perfecto, al menos de momento ya que todavía no han sido detenidos los culpables ni se ha recuperado la mercancía.
Más allá del perjuicio económico, que imaginamos que tendrá que reembolsar alguna aseguradora, os podéis hacer una idea del trastorno que le debió causar a BMW el quedarse sin sus vehículos a falta de un par de semanas del Salón de Nueva York. De momento BMW tan sólo ha reconocido que el robo sucedió y que toda la información de que disponen ya ha sido facilitada a las autoridades.
Vía: New York Post
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