Cuando uno ve cosas así se da cuenta que Dios le da pan a quien no tiene dientes. Me explico, si tienes una verdadera joya sobre ruedas, como es un Ferrari Enzo, has de tener un mínimo aprecio y cuidado. Y si no es así, para algo está la chequera, para encargárselo a un profesional que verdaderamente sepa lo que hace.
Todos deberíamos saber que un lavado del coche poco cuidadoso puede estropear o afear muy fácilmente su pintura. Sin ir más lejos, meter el coche en algunos lavados automáticos de rodillos puede suponer un boleto seguro hacia microarañazos en la capa superior de laca de la pintura, algo de lo que nos daremos muy fácilmente cuenta cuando expongamos nuestro coche a la luz directa del sol. Sin embargo, un lavado (o secado) a mano descuidado tampoco garantiza buenos resultados, y como prueba tenéis el Ferrari Enzo del siguiente vídeo.
El vídeo fue grabado durante una concentración de propietarios de Ferrari en Padborg Park, en Dinamarca, y en él podemos ver al propietario de un Ferrari Enzo en un sitio donde lavar los vehículos a mano, empleándose a fondo con una bayeta de microfibras cogida del suelo y bastante sucia, con arenillas incluidas. El resultado habla por sí mismo: numerosos microarañazos en forma de remolinos (o swirls) en la laca de la pintura rossa del Enzo, probablemente por simple desconocimiento de que las pinturas son mucho más delicadas de lo que algunos se piensan.
No es una desgracia, porque con un buen pulido y un tratamiento posterior de manos de un detailer profesional se podrá corregir perfectamente y sin traumas, pero creo que todos pensaremos que este Enzo merecería un poco más de cuidado y un trato un poco mejor. Si al fin y al cabo hacer las cosas bien no cuesta tanto trabajo…
Vía: GT Spirit
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