El Mercedes SLS AMG Black Series será un SLS AMG GT3 de calle

Para Mercedes-Benz no hay tiempo que perder. Defenestrado el Mercedes SLR McLaren y finalizado el acuerdo que les unía a los de Woking, el objetivo ahora es jugárselo todo a una baza: el Mercedes SLS AMG. Definitivamente han hecho un coche muy rápido, con sentimiento y flema clásica. Pero siempre habrá clientes exigentes que le pidan el máximo de radicalidad a un coche que aunque esté pensado para correr e ir muy rápido, seguirá homologado para circular por carretera, para ellos muy pronto llegará el Black Series…

Hace un mes se presentaba en el Salón de Nueva York el Mercedes SLS AMG GT3, el deportivo de carreras-cliente preparado para competir en campeonatos que sigan la especificaciones FIA GT3. Los amantes de las verdaderas sensaciones de los vehículos de competición estarán de enhorabuena al comprobar que muy probablemente el Mercedes SLS AMG Black Series heredará la mayoría de los detalles de su homólogo de carreras, lo cual incluye un alerón digno de un cochecito de radiocontrol.

Mercedes SLS AMG GT3

El Mercedes SLS AMG Black Series mantendrá casi con total seguridad el motor V8 de 6.2 litros, aunque es de suponer que tendrá pequeños retoques para incrementar sus prestaciones con 600 CV de potencia y 700 Nm de par máximo. Igual de interesante será el ahorro que supondrá el empleo de paneles de fibra de carbono, llantas de aleación ligera de competición y prescindir de todo aquello que no sea estrictamente necesario para que la báscula marque 50 kg menos.

El Mercedes SLS AMG es un deportivo pensado para transmitir sensaciones y también para correr muy rápido, definitivamente los cruceros a gran velocidad por autopista y una utilización para el día a día no son lo suyo, aunque que demonios, lo que daríamos cualquiera de nosotros por pegarnos un viaje al volante de este coche. Os puedo asegurar por experiencia propia que para aquellos que no estén acostumbrados, el trámite de abrir la puerta, entrar el habitáculo, sentarse y cerrar el famoso “ala de gaviota” puede ser una auténtica tortura.

En ese sentido nos imaginamos que el Mercedes SLS AMG Black Series no mejorará, sino que ciertamente perderá bastante en cuanto a confort. Por suerte me apostaría todo el dinero y no lo perdería asegurando que a aquellos afortunados que estén dispuestos a pagar los más de 275.000€ que costará no les importará lo más mínimo viajar en un coche “incómodo”. Se dice que se comenzarán a entregar los primeros en 2013 en una edición de tirada limitada.