Tras la filtración de ayer Porsche no ha tardado en suministrar información oficial acerca de una de sus creaciones más desmadradas. Más potente que el venerado Carrera GT, esta iteración del Porsche 911 GT2 lleva el apellido “RS”. Renn Sport, que significa diseñado con el circuito y las sensaciones en mente. El salto prestacional es mucho mayor que entre sus primos – los GT3 y GT3 RS – que sólo se llevan 15 CV de potencia. No, el Porsche 911 GT2 RS le lleva nada menos que 90 CV al GT2 estándar.
El motor 3.6 biturbo – con turbos de geometría variable, refrigeración por agua e inyección indirecta – produce 620 CV. Porsche no ha suministrado datos de par máximo, pero sí han confirmado en una escueta nota de prensa que mediante una asociación a una caja de cambios manual de seis relaciones es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 3.4 segundos. Es 0.3 segundos más rápido que el GT2 de 530 CV. No habrá opción a una PDK de doble embrague, y tampoco está presente la tracción total.
La velocidad máxima se ha quedado en 330 km/h, pero creo que tampoco es un mal dato. Es un coche que puede asustar al más pintado, y aún tenemos más datos para intimidaros. Por ejemplo, el peso: 1.370 kg con todos los fluidos necesarios para su funcionamiento, no un peso en vacío. Con 70 kg menos que un GT2, cuenta con una relación potencia-peso de 2.21 kg/CV. Como efecto colateral a esta reducción de peso, Porsche asegura que el GT2 RS es un 5% más eficiente que el GT2 en consumos.
Concretamente consume una media de 11.9 l/100 km, o 284 g/km de CO2. Consume menos que un Ferrari 458 Italia. Es una cifra a elogiar, teniendo en cuenta que los neumáticos que lleva tienen unas medidas 325/30 ZR19 en el eje trasero. Estos neumáticos especialmente diseñados para el GT2 RS permiten pasar de manera adecuada sus prestaciones al suelo. Otras cifras que nos han dejado sin palabras es un 0 a 200 km/h en 9.8 segundos y un 0 a 300 km/h en sólamente 29.8 segundos.
Tampoco creo que nos importe demasiado si estamos destrozando el asfalto a sus mandos. Estaremos sentados en un habitáculo del que no tenemos información visual oficial, pero que sabemos empleará Alcantara de color negro en todas partes, con detalles de color rojo en asientos, volante, palanca de cambios o freno de mano. La dieta ha alcanzado incluso a los tiradores, que han sido reemplazadas por tiras de fibra. Los asientos están fabricados en plástico reforzado con fibra de carbono.
El mismo material está presente en el capó o las tomas laterales de aire. La carrocería tiene detalles novedosos, como las ópticas traseras renovadas, un paso delantero de rueda algo más voluminoso y los emblemas de este modelo. Pero al final todo se circunscrible al placer de circuito y la eficacia, de hecho Porsche asegura que es capaz de hacer 7 minutos y 18 segundos en una vuelta al famoso Infierno Verde, más rápido que la mayoría de superdeportivos de producción.
Lo consigue gracias a una mezcla de precisión y electrónica poco intrusiva. Tenemos una suspensión activa retocada (PASM) y un control de tracción y estabilidad recalibrados (PSM), que colaboran junto a los montantas activos del motor para ofrecer unas prestaciones de infarto. Y si queremos jugar a ser Walter Röhrl, podemos desactivar todas las ayudas al completo, aunque eso podría poner en aprietos la integridad de nuestro juguete – que se venderá por 245.000$ en EEUU – si no tenemos buenas manos.
Sólo 500 unidades se fabricarán, a un precio para Alemania de 237.578€. Sin impuestos, el precio franco en fábrica es de 199.500€. Nos sorprende que el 911 aún no haya tocado techo, una versión de tracción trasera y 620 CV tampoco parece que vaya a ser el límite de uno de los iconos automovilísticos más reseñables de la historia, que ha permanecido casi inalterado desde los años 60.
Porsche 911 GT2 RS, dispuesto a morderte
Vía: Porsche
En Diariomotor: Así es el Porsche 911 GT2 RS