Este Gran Premio de Fórmula 1 de Mónaco pudimos ver muchas cosas, entre ellas como un juego de neumáticos de compuesto intermedio soportaban todo el peso de prácticamente una carrera completa en el circuito de Mónaco. Lógicamente hablamos de los neumáticos que instaló Fernando Alonso en su monoplaza tras su único paso por boxes en la primera vuelta, con los que sorprendentemente cruzó la bandera a cuadros sin que éstos sufrieran un desgaste mortal de necesidad.
Llegado a este punto viene a mi memoria lo sucedido en este mismo escenario en 2005, donde el protagonista también fue el asturiano sufriendo la presión de sus contrincantes y luchando curva a curva por llegar a meta con unas gomas que prácticamente le llevaban flotando sobre el asfalto del principado. Respecto a este tema también recuerdo algunos de los momentos más ridículos de la Fórmula 1, pero, ¿ha llegado la estabilidad de los neumáticos a la Fórmula 1? Para nada…
Bridgestone abandonará la categoría reina del automovilismo para dejar paso a Michelin y Pirelli que de momento serán las dos marcas que pondrán sobre la mesa su proyecto para tratar de cautivar a los equipos de Fórmula 1 que competirán en 2011, y es que de nuevo se vislumbra la rivalidad entre fabricantes de neumáticos y de nuevo cada equipo se enfrentará al dilema de tomar una decisión en los próximos meses.
Matizando el resultado de Fernando Alonso y sus neumáticos en Mónaco, hay que decir que en mayor o menor medida pudo influir la puesta a punto del monoplaza de Ferrari y la conducción del asturiano, amén de las vueltas que hicieron en fila india tras el Safety Car. También es cierto que en las últimas vueltas acusó el desgaste y tuvo que trabajar por mantener las gomas, pero indiscutiblemente el rendimiento conseguido fue cuanto menos sorprendente.
Quizás el sistema actual de dos compuestos diferentes y la obligación de utilizar ambos durante una carrera, sea un buen aliciente para propiciar estrategias tras el pit-lane, preparar un stint rápido y corto y otro más largo y de resistencia con el compuesto más duro. En fin, ofrecer un atractivo añadido a los espectadores y a la propia competición. De momento lo único cierto es que en 2011 tendremos un aliciente más, el regreso de la lucha entre dos fabricantes de neumáticos: franceses vs italianos. ¿Quién será el ganador?
Vía: Motorsport.com
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