Para el año que viene los Range Rover sustituirán el motor turbodiésel de ocho cilindros por uno nuevo de mayor cilindrada. Simultáneamente este bloque ofrecerá un mayor rendimiento y mayores prestaciones. Sin duda es una buena noticia que un coche gastón por definición pueda ir reduciendo el consumo a cada paso.
Este motor V8 ofrece un 15 % más de potencia, de los 272 a os 308 CV, y además procura un mayor par máximo de 700 Nm entregado a únicamente 2.000 rpm. La caja de cambios asociada será una automática de ocho velocidades y por supuesto usará la tracción integral que ya lleva el motor diésel sustituido. Una de las mayores ventajas del nuevo motor es su menor consumo, 10.2 litros/100 km frente a 11.1 litros.
Proporcionalmente su elevada emisión CO2 se reduce de 294 a 264 gr/km. En cuanto a prestaciones el Range Rover 4.4 diésel (se desconoce si llevará la coletilla TDV8) será capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7.2 segundos y de alcanzar 208 km/h, 2 segundos menos y 8 km/h más respectivamente.
El precio de este Range Rover diésel será 3.000 euros más elevado que el modelo actual en Alemania, por lo que podemos imaginar que la subida de coste en nuestro mercado será proporcional o ligeramente más elevada. En Alemania llegará a partir del mes de octubre a los concesionarios.
En la gama del Range Rover 2011 también se encontrará disponible el motor V8 de 5.0 litros gasolina, bien atmosférico con 375 CV o bien sobrealimentado con 500 CV, y el diésel V6 de 3.0 litros y 245 CV de potencia.
Vía: worldcarfans
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