Por fin se flexibiliza el mantenimiento o la reparación de los vehículos durante el período de garantía. A partir de hoy mismo los fabricantes de automóviles no podrán exigir a los clientes que mantengan o reparen los vehículos en los talleres autorizados de la marca durante el período de garantía, estas mismas tareas se podrán realizar en otros talleres.
Es decir uno podrá llevarse el coche a otro taller que no sea uno de la propia marca o autorizado y podrá realizar el mantenimiento habitual o reparaciones sencillas sin perder por ello la cobertura de la garantía. La medida tiene el claro objetivo de reducir los costes que deben sufragar los clientes por estos sencillos trabajos, que a menudo tienen un precio excesivamente elevado.
Al margen es esta mayor libertad la disposición define que los fabricantes deben facilitar el acceso de los talleres no oficiales a las piezas de los automóviles, un gran escollo que hasta ahora los talleres independientes han tenido que ir salvando con retrasos y costes elevados. De esta manera los costes de mantenimiento y reparaciones básicas a la largo de la vida útil del vehículo deberían disminuir notablemente.
De todas formas la misma medida establece que las compañías podrán seguir demandando que ante la necesidad de sustituir piezas que se encuentren en garantía la operación deba realizarse en los talleres oficiales o autorizados. Aunque la medida se aprueba hoy con todas estas características, las marcas tienen tres años para irse adaptando a esta normativa. Tengo la impresión de que costará un cierto tiempo comenzar a ver los frutos de esta “sentencia” pero en teoría esta decisión nos debería favorecer a todos como usuarios finales.
¿Y qué pasa con los talleres-concesionarios de las propias marcas? Es cierto que muchos de ellos se mantenían, especialmente en esta época de crisis, de las reparaciones más que de los márgenes de venta. El dicho dice “renovarse o morir”. Probablemente deban revisar su estructura de costes para adecuarla a los nuevos tiempos y aportar cierto valor que anime a los clientes a utilizar sus servicios de mantenimiento y reparación en lugar de los de los talleres independientes.
Esta es mi opinión pero admito que desconozco la organización de costes en talleres en profundidad.
Vía: motorpasión | tve
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