El vehículo que os mostramos en las imágenes es el futuro Citroën DS3 WRC, que reemplazará al actual Citroën C4 WRC en un futuro próximo. Su introducción coincidirá con el cambio de normativa de la FIA, que exigirá motores 1.6 turbo en lugar de los habituales 2.0 turbo, con el objetivo de dar un giro medioambiental a la competición. Permitidme no comentar este aspecto, es el equivalente a hacer más respetuoso a un Cadillac Escalade lanzando una versión híbrida que a pesar de que lleva un 6.0 V8 bajo el capó tiene un motorcito eléctrico de 20 CV.
Críticas personales aparte, el DS3 WRC de las imágenes está construido sobre las especificaciones R3T, pero en lugar de un motor con 210 CV y 350 Nm lleva un 1.6 turbo más desarrollado con al menos 280 CV de potencia y cerca de 450 Nm de par máximo. Es un motor desarrollado a partir del habitual 1.6 THP de PSA-BMW, pero modificado hasta la médula con todo tipo de refuerzos internos y piezas específicas de competición, imposibles de ver en un Citroën DS3 de calle. Llevará tracción total permanente y una caja de cambios secuencial de seis velocidades.
Aún así, ya que la introducción de estas normas no será efectiva hasta 2013 por el momento empleará una versión descafeinada del 2.0 turbo del C4 WRC para sus sesiones de prueba. Otro toque especial de este DS3 WRC será el impresionante kit de carrocería que lleva, ensanchado hasta los límites de lo posible (atentos al tren delantero), y dotado de enormes aditamentos aerodinámicos como el gran alerón trasero. Es importante que la aerodinámica del coche sea efectiva para todos los tipos de superficie sobre los que se desarrolla el piloto.
El prototipo ha sido espiado con configuración de asfalto y con Sebastian Loeb tras el volante, previsiblemente en Francia.
Vía: Autocar
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