Una de las razones que esgrimen los aficionados a la conducción de un todoterreno es el placer que produce recorrer rutas inaccesibles para cualquier automóvil y estar en contacto con la naturaleza de una forma especial, aún más especial si cabe cuando lo que conduces es un todoterreno descapotable. Quizás a excepción de los Jeep Willys y poco más, sean más raros que un perro verde, ya que en muchos casos la única solución para disfrutar de un verdadero todoterreno cabrio sea recurrir a preparaciones ajenas a la marca.
Nuestro hallazgo del fin de semana es éste Sheer Rover, una preparación de un Range Rover de 1985 construida por los carroceros londinenses de Wood & Pickett, los cuales, además de preparar varias versiones descapotables de este emblemático todoterreno también tuvieron ocasión de fabricar por encargo algunos modelos de carrocería alargada estilo limusina o incluso un Range Rover con seis ruedas. En este caso lo que podéis ver en las fotografías es un Range Rover con techo de lona desmontable.
Como ya se puede apreciar en las fotografías la ausencia de techo ha tenido que ser suplida por una barra central antivuelco. Es algo imprescindible pero aún así sigue siendo inseguro para un uso todoterreno extremo, pese a que con su motor V8 de 3.5 litros y esos neumáticos BF Goodrich de campo sea capaz de subirse por las paredes.
En este Range Rover con carrocería de tres puertas se ha redecorado el habitáculo, que después de 25 años se conserva en buen estado. A bordo mucha piel de sufrido color crema e incrustaciones de madera que nos pueden disuadir de introducirnos en barrizales y pistas cubiertas de polvo.
Por cierto, que aunque los Range Rover descapotables sean toda una rareza no son pocas las empresas que se dedican a fabricar estas adaptaciones. Hace un año ya conocíamos el trabajo de Newport Convertible Engineering con el Range Rover.
Vía: Marktplaats | Autoblog.nl
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