En todo momento ha quedado claro que el Range Rover Evoque es una parte importantísima de los movimientos estratégicos de Land Rover. En París ha tenido su puesto de honor y nuevamente estuvimos allí, en los ojos y las manos de Juanma y David para comprobar en directo cómo es el Evoque de tres puertas.
El Evoque impresiona partiendo desde el exterior. Viéndolo al lado de diferentes personas aparenta ser más corpulento e imponente que cuando lo veíamos a través de las fotos oficiales, que en ciertas ocasiones son algo traicioneras. E incluso parece que estemos viendo un prototipo porque del LRX Concept al Evoque han cambiado sólo pequeñas cosas y eso creo que ha satisfecho a la mayoría
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Quizá un detalle que sea negativo para muchos es la altura a la que se encuentra el piso del coche de cara al acceso al habitáculo. Posiblemente sus creadores se apoyen en la idea de que a bastantes conductores y pasajeros les gusta esa sensación de viajar a una cierta altura. Pero dado que el Evoque lleva el adjetivo premium posiblemente éste no sea un aspecto más clave para su comprador.
Pero posiblemente el “juego” del interior del habitáculo es lo que más choca. ¿Diseño deportivo para el interior de un SUV, de un Range Rover? Pues así es, ahí Land Rover ha pretendido llamar la atención de los jóvenes diseñando un habitáculo digno de un compacto deportivo. Los asientos que no dejan de ser deportivos y “coloridos” o la construcción del salpicadero no hacen más que reseñar que no es un coche hecho especialmente para gente mayor (con todos los respetos, por supuesto).
La altura de su carrocería es un factor clave para la amplitud de puertas para dentro sea lo suficientemente buena para un SUV compacto. Y en anchura queda claro que los espacios también son adecuados a pesar de que en la primera fila exista un túnel central ancho que las separa. En los dos asientos traseros ocurre lo mismo. La sensación de cerrado tampoco parece existir en este caso gracias a las largas lunas laterales y al amplio techo solar.
De nuevo aludiendo a la “dimensión Y”, su facilita un aspecto que resulta muy interesante en un coche que sigue siendo “compacto”: el maletero. La boca de entrada a este espacio se revela como bastante práctica y no resulta estar a demasiada altura, así que todo apunta a que será muy práctico. Claramente supera los 400 litros que son más que suficientes para la mayoría de cosas.
A título personal me da la impresión de que el Evoque es a Land Rover lo que el CT 200h es a Lexus, un punto de entrada para los jóvenes que pueden acercarse a un nivel premium y que posteriormente podrían adquirir otro vehículo de la marca de más calibre, que podría ser el Range Rover Sport o el Lexus GS por poner dos ejemplos.
Para ese tipo de cliente al que le guste el coche pero necesita una habitabilidad más amplia existirá el Evoque de cinco puertas y que se supone tendrá cuatro plazas (2+2) como el de tres puertas.
Range Rover Evoque en el Salón de París
Range Rover Evoque
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