En los últimos meses se ha acelerado la puesta en marcha de los primeros radares de tramo en el territorio español, de tal forma que la DGT tiene listos los tres primeros para comenzar a funcionar normalmente. Recordemos que se tratan de dispositivos que miden la velocidad media de un vehículo en determinada distancia en función del tiempo que tarda en recorrerla (física elemental: v=d/t) y fichan al que supera la velocidad permitida.
Aunque no se conoce la fecha exacta, en muy pocas semanas comenzarán a funcionar los tres radaras de tramo, cuyas localizaciones ya han sido desveladas: uno en la AP-66 en la provincia de León, otro en la A-6 en los túneles de Guadarrama y otro más en la A-7 a la altura de Torrox (Málaga). Los tres tramos se corresponden con túneles, donde la velocidad máxima siempre es inferior a la de la propia vía.
Siempre noto que en los túneles la gente ignora completamente las restricciones de velocidad; generalmente están limitados a 80 km/h pero muchos conductores ni siquiera reducen la velocidad de su marcha, que en muchas ocasiones es superior a los 120 km/h reglamentarios. Ya sé lo que estaréis pensando: ingentes sumas de dinero para las arcas del Estado.
Sin embargo, las primeras semanas de funcionamiento de estos radares serán introductorias por decirlo de alguna forma: la DGT no multará al infractor pero sí le enviará una carta a su domicilio en la que serán explicados el motivo de la sanción y el funcionamiento del nuevo dispositivo. Es decir, concienciarán a los infractores de la pupa que les puede hacer.
Realmente, no considero necesario que tengan que hacer esta notificación si el conductor no tiene que pagar multa, puesto que estos radares estarán debidamente señalizados tal y como marca la normativa, al igual que ocurre con los más de 500 radares fijos que pueblan la geografía española.
Esta primera oleada es sólo la primera aproximación hacia un futuro repleto de radares de tramo. En una comparecencia de hace meses, el Ministro de Interior Alfredo Pérez Rubalcaba subrayó que van a extender el uso de estos dispositivos puesto que son más justos que los radares fijos actuales. Aseguran que surtirá efecto ante los conductores que sólo frenan cuando ven el radar, y que “perdonará” a los que se pasen de velocidad durante un breve momento puntual.
Vía: Europa Press
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