En los últimos años se ha vivido un auténtico boom en cuanto a la aparición de fabricantes de superdeportivos, muchos de ellos impulsados por multimillonarios de países emergentes. Sin embargo, esto no es un invento de la última década sino que ya por los años 80 y 90 existían ambiciosos proyectos para lanzar deportivos artesanales derivados de modelos ya existentes.
Tal es el caso del prototipo Tresaire, un modelo creado por una empresa de Florida en estrecha colaboración con General Motors, que hizo su debut en el Salón de Detroit de 1990. Se trataba de una reinterpretación del Chevrolet Corvette basada en la generación C4. Como se puede ver en las fotos, su línea nada tenía que ver con la del mítico deportivo, aunque sus impulsores tenían la firme intención de poder llegar a comercializarlo.
A pesar de que tiene 20 años, su línea no está nada desfasada, como tampoco lo está su tecnología. Su carrocería está fabricada íntegramente en fibra de carbono, lo que permite que su peso total se quede en sólo 1.135 kg. El motor utilizado es un 4.0 V6 de origen GM potenciado hasta 350 CV, lo que se traduce en una excelente relación peso-potencia.
El habitáculo incluía numerosos adornos en fibra de carbono, algo muy común actualmente pero que en aquella época apenas existía. También incluía detalles como una cámara trasera pero lo realmente novedoso es su techo, fabricado en cristal, completamente retráctil y que permite configurarlo como Targa.
El coche sólo tiene 500 km en su odómetro, por lo que queda claro que apenas ha sido utilizado en estos 20 largos años. Se encuentra a la venta en un concesionario holandés, aunque indagando por la red me he encontrado un anuncio del mismo coche con las mismas fotos en algún lugar de EEUU. El precio en éste es de unos 250.000 dólares, una cifra importante aunque se trata de un coche único.
Vía: Autoblog.nl | ClassicCarsForSale
En Diariomotor: Corvette Stingray Concept, de camino un Speedster | ¿Qué plan tiene General Motors para el Corvette? | Corvette + Viper = ViperVette
