Porsche repite con esa denominación tan clarificadora llamada Black Edition. La lleva un Porsche 911 muy oscuro y ahora también la llevará el cabrio más asequible de toda la familia de Stuttgart, nuestro querido Boxster. Pero no un Boxster cualquiera sino el Boxster S porque con el nombre “edición negra” hay que dar la talla.
“El concepto de color del Boxster S Black Edition es consistente en cada detalle” dice Porsche y, aunque no dudo de su consistencia, me parece que color poco. Todo se viste de color negro en este cabrio superdeportivo incluidas las parrillas, las salidas de escape y la capota de lona. Precioso para el que le guste el negro pero quizás algo problemático en verano. O no si dejas que en todo momento te de el aire de la marcha.
Creo que no hace falta decir cuál es el “color” que predomina por dentro. Pero es que además de negro, que incluso llega al fondo del cuadro de instrumentos personal del conductor, también hay hueco para el plateado. Un poquito que lleva el volante Sport Design y un muchito que va estampado en las placas situadas en los umbrales de las puertas. La firma “Black Edition” se encuentra ahí y en la plaquita que indica el número de unidad de la tirada.
Este Boxster S viene equipado hasta las trancas al completo. Trae de serie los paquetes de Comfort, Infotainment y Design que hablan por sí solos. El PCM (Porsche Communication Management) viene con el módulo de navegación por satélite. También son de serie los faros Bi-Xenon con luz de giro, las luces LED, o el Sound Package Plus. En cuanto a opciones destacan los frenos carbocerámicos o la suspensión activa PASM.
Dejándonos de bonitos adornos y equipamientos, bajo la elegante capota del motor se esconde el motor que desde el 2009 lleva el Porsche Boxster S aunque con un par de ajustes: el seis cilindros boxter de 3.4 litros entrega 320 CV, 10 CV más que de serie, a 7.200 rpm. Así misma suma 10 Nm de par máximo hasta alcanzar los 370 Nm, entregables a 4.750 rpm. Porsche promete que este cambio no afecta en nada al consumo (9.8 litros de media).
Pero sí que afecta al despegue en pista. Con el cambio manual de seis velocidades, el de base con opción a cambiarlo por el PDK, este Black Edition de techo abierto acelera de 0 a 100 Km/h en 5.2 segundos, una décima menos que de serie, y alcanza los 276 Km/h, 2 Km/h más. Minucias que sólo se notarían dándole con mucha fuerza en circuito. Este extra de caballaje está ahí para distinguir aún más a esta edición especial del Boxster S.
¿Y cuál es el número mágico de ejemplares esta vez? Pues 987. Sacad vosotros vuestras propias conclusiones. Sería una sorpresa que alguno de estos Porsche Boxster S se dejase caer por España, a Alemania llegarán en marzo por un precio de 63.304 euros (VAT incluido).
Vía: Porsche
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