Pensar en un Koenigsegg CCR y una vez que lo has conducido no quedar satisfecho parece algo de clientes excesivamente exigentes con su compra. Cualquiera de nosotros estaría contento con una máquina de esas características, casi aunque fuese de plástico. Para que vamos a negarlo.
Pero existe gente así y eso lo saben en Edo Competition, de ahí que se decidieran a aceptar el trabajo que les solicitaba el dueño del Koenigsegg CCR que vemos en las imágenes. Quería sacarle más partido a su coche, ya que los 3.2 segundos que hace en el 0 a 100 km/h no parecen ser suficientes para él.
No especifican la nueva cifra, pero si dicen que han mejorado su aceleración y su respuesta ante un pisotón desesperado al acelerador. Para ello, han modificado la ECU y la forma en la que el sistema de doble compresor entra en acción cuando el motor V8 4.7 necesita toda su potencia. Potencia que ahora se eleva a los 891 CV (816 CV de serie).
Pero por contra, la velocidad máxima se ha visto reducida ligeramente, por lo que ahora ya no alcanza esos teóricos 394 km/h de punta. “Sacrificios” que hay que hacer para conseguir una aceleración más bruta y mejorada. Otro de los cambios lo vemos en la línea roja del tacómetro, situada a 7.200 rpm, rebajando en 600 rpm la marca del coche de serie.
Estos cambios se han hecho con la colaboración de la propia marca sueca para evitar dañar el motor V8 con el exceso de potencia y que aguante los “embistes” de su dueño. Y nosotros deseando poder catar un coche de este estilo aunque sea de serie. Que mal repartido está el mundo y que gusto da tener una cuenta corriente como muchos ceros.
Fuente: Serious Wheels
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