El matrimonio de Chrysler y Fiat ha dado sus primeros frutos tan pronto que podría pensarse que la firma italiana ha adquirido la mayoría de las acciones de Chrysler. Sin embargo, esto no es así ni mucho menos, puesto que el acuerdo de compra inicial sólo contempla una participación máxima del 35%. En un principio se comenzó con un 20%, en enero se elevó al 25% y ahora esta cifra pasa a ser del 30%.
El aumento de la participación estaba estipulado en base a determinados objetivos impuestos en el acuerdo inicial. Para lograr llegar al 30% era necesario que Chrysler alcanzara más de 1.500 millones de euros de ingresos fuera de EEUU y ciertos acuerdos de comercialización en Europa y Sudamérica. En las últimas fechas se han cumplido estas condiciones, por lo que Fiat no ha tardado en hacerse con un 5% más de acciones hasta llegar al 30% del que disfruta desde esta semana.
De los acuerdos de comercialización ya hemos hablado largo y tendido en Diariomotor, básicamente consistentes en la venta de varios modelos de Chrysler bajo la marca Lancia en Europa, además del Fiat Freemont, que es un calco del Dodge Journey. En cuanto a Sudamérica, algunos modelos de la marca del pentastar comenzarán a comercializarse bajo la marca Fiat en Brasil, donde gozan de buena reputación y registran una fuerte presencia.
Aún queda margen para aumentar la presencia del grupo italiano hasta el 35%. La condición necesaria para llevar a cabo esta última ampliación es que las autoridades estadounidenses aprueben un proyecto para el desarrollo de un vehículo de bajas emisiones que se venderá en EEUU bajo la marca Chrysler, aunque la plataforma y la ingeniería procederán principalmente de Fiat.
Por el momento no se conoce a nivel oficial ningún plan futuro para aumentar el accionariado más allá del 35%, aunque varias fuentes norteamericanas señalan que Marchionne quiere que Fiat controle hasta el 70% de Chrysler. Por el momento, el sindicato de trabajadores United Auto Workers (UAW) es el que tiene la sartén por el mango, con una participación del 59.2%. El resto del pastel se reparte entre el Tesoro estadounidense (8.6%) y el Gobierno canadiensa (2.2%).
Fuente: Europa Press
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