Infiniti hace sin duda buenos productos que nada tienen que envidiar a los modelos de las principales marcas premium rivales, aunque todo estaremos de acuerdo en que sus coches adolecen de ser demasiado burgueses. Más orientados al lujo, hasta ahora las únicas concesiones a la deportividad que hemos visto es el Infiniti G Coupé IPL creado por Infiniti Performance Line, con ciertos retoques mecánicos frente a los Infiniti G convencionales.
Lexus sufría una situación similar a esta, a la que finalmente puso remedio lanzando el Lexus IS-F y posteriormente el Lexus LFA. Ahora, Infiniti quiere seguir los pasos de la firma premium de Toyota y por ello están sopesando el desarrollo de un vehículo de altas prestaciones, probablemente una versión más bestia del Infiniti G. En la búsqueda de aliados para tal aventura, se cree que se apoyará en la escudería de Fórmula 1 Red Bull, con la que mantiene estrechos lazos comerciales desde hace poco tiempo.
Puede que a más de uno le sorprendiera que una marca de tamaño mediano tirando a pequeño como es Infiniti se convirtiera en uno de los principales patrocinadores de la escudería vencedora del Campeonato de F1 del pasado año, pero puede que lo que aquí contamos hoy ayude a aclarar muchas cosas. Al parecer, la colaboración va más allá de un simple patrocinio, e Infiniti aprovechará los conocimientos adquiridos por el equipo Red Bull Racing en los últimos años para trasladarlos a un coche de calle.
No en vano, esta no es la única conexión que ambas partes tienen. Los monoplazas de Red Bull están propulsados por motores de origen Renault, empresa aliada con Nissan que a su vez es la casa matriz de Infiniti. Precisamente Renault ya colaboró en su día con la escudería Williams para crear el fantástico Clio Williams, por lo que ve con buenos ojos la posibilidad de un Infiniti mucho más vitaminado.
Como dije más arriba, el modelo seleccionado es el Infiniti G, que de hecho es el modelo que más se aproxima a la idea de deportividad que todos tenemos en mente. Partiendo de su base, los ingenieros de Infiniti colaborarían con Red Bull para adaptar el modelo desde numerosos puntos de vista (suspensiones, frenos, aerodinámica, electrónica, etc…) de cara a ofrecer un coche que, visto así, rivalizaría con modelos como el BMW M3 o el Audi RS5.
La cosa está de momento en sus fases iniciales, si es que realmente va a llegar a buen puerto. Se estima que este Infiniti G Coupé puesto a punto por Red Bull llegará al mercado en un par de años, no se sabe si con la actual generación del modelo o ya con la siguiente, puesto que el actual Infiniti G cuenta ya con cinco años a sus espaldas.
Fuente: Autoblog.com
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