¿Puede haber más mal gusto lujo y opulencia que un coche forrado en oro? Seguro que al hablar de oro y automóviles, muchos pensaréis en un superdeportivo caro y potente, a cuyo propietario le sobra el dinero y se ha propuesto personalizarlo de esta forma tan aparente y de gusto más que discutible. No cabe duda, muy pocos serían los que podrían permitirse tal lujo, pero el caso que aquí os mostramos se puede decir que es totalmente opuesto. Y es que, precisamente, el Tata Nano es el máximo exponente de microcoche low cost, nacido para proporcionar movilidad a las economías emergentes al precio más bajo posible.
¿Sería compatible un Tata Nano completamente recubierto de oro y joyas? Lo cierto es que sí, y a las pruebas me remito. Otra cosa es que esta acción tenga algún sentido o justificación, pero aquí ya entraríamos en otras cuestiones. Probablemente, y pese a su particular estética casi bling-bling, no gozaría de demasiado éxito entre los raperos dados al oro y a la ostentación de joyería y bisutería variada, más acostumbrados a otro tipo de coches, pero lo que no cabe duda es que este Tata Nano Gold Plus llamará la atención allá donde vaya.
Lo cierto es que es curioso cómo un humilde Tata Nano, nacido con el objetivo de ser el coche más barato y asequible del mundo, puede convertirse también en uno de los vehículos más caros del mundo, una dualidad bastante curiosa y hasta cierto punto ejemplo de antítesis paradójica.
El Tata Nano nació con unas previsiones de ventas bastante elevadas, intentando conquistar aquellos países emergentes donde el automóvil era un lujo al alcance de muy pocas personas. Las ventas no han sido todo lo elevadas que esperaban desde la propia marca, ni siquiera en la India, de ahí que lleguen maniobras estratégicas de publicidad como esta, intentando insuflar más vida y éxito comercial al modelo.
En asociación con las joyerías Goldplus, que celebran un aniversario milenario y actualmente pertenecientes al enorme conglomerado insdustrial de Tata, este Tata Nano tan particular se ha presentado con el objetivo de ser expuesto en diferentes concesionarios de la marca hindú durante los próximos seis meses. La intención no es su venta, sino ejercer de atracción y relanzar la comercialización de los Nano en el país de las vacas sagradas.
Lo que llama la atención de este Tata Nano Goldplus es su exterior: realizado de forma artesanal con un revestimiento exterior de casi 90 kilogramos de oro de 22 kilates, que incluyen hasta los tapacubos, así como otros 15 kilos de plata y más de 10.000 piedras preciosas, decorado con motivos tradicionales hindúes. Mejor no pensar en cómo se desenvolvería en la carretera con su pequeño motor y tanto lastre peso extra, pero como curiosidad os diremos que este trabajo de artesanía joyera sobre ruedas está valorado en 4,6 millones de dólares, prácticamente 3,5 millones de euros. Casi nada.
Fuente: Carscoop | Jalopnik
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