Para un fabricante de automóviles generalista como Citroën es todo un reto lanzar una línea de automóviles distinguidos y premium, en tanto en cuanto el estándar de calidad de acabados, materiales empleados, ajustes, posibilidades de equipamiento y personalización y mecánicas disponibles dista mucho de lo que habitualmente nos había ofrecido este fabricante francés. En cualquier caso los DS ya son una realidad y en poco más de cuatro meses ya serán tres los modelos disponibles en el mercado y más de 150.000 las unidades vendidas.
Hasta ahora habíamos visto como muchos concesionarios Citroën se adaptaban a la llegada de los nuevos DS3 y DS4 conquistando su propio rinconcito DS en el que el cliente pudiera explorar las posibilidades de configuración de su futuro vehículo premium francés. Pero para Citroën esto no es suficiente y creen conveniente que el siguiente paso sea la creación de concesionarios única y exclusivamente para vehículos DS, adyacentes a los ya existentes de Citroën, así como “superconcesionarios” en las zonas más representativas de las grandes capitales europeas.
La idea es sencilla y fácilmente comprensible: un vehículo exclusivo y diferente también requiere de concesionarios propios y distinguidos del resto.
En principio los concesionarios DS aprovecharían la infraestructura ya existente y, aunque separados físicamente, seguirían estando conectados a los concesionarios Citroën de toda la vida. No obstante la idea de los “superconcesionarios” iría mucho más allá y buscaría el posicionamiento estratégico de los locales con dos motivaciones: llegar a un mayor número de potenciales clientes y potenciar la imagen de marca y diferenciación de los DS3, DS4 y a partir del año que viene también DS5.
Se trata de una estrategia que recuerda a la ya seguida por otros fabricantes fuera de la industria del automóvil, véanse las Apple Store o sin ir más lejos McDonald’s, que parece tener una franquicia en todos y cada uno de los rincones más representativos a lo largo y ancho de este planeta…
De momento el Citroën DS3 ya ha conseguido cautivar a 135.000 compradores, de los cuales un 60% llegaban por primera vez a Citroën. Del Citroën DS4 ya se han tramitado 20.000 reservas y se espera que en 2012 se vendan más de 40.000 unidades, las mismas que están previsto venderse anualmente del Citroën DS5 cuando se inicie su comercialización en el primer trimestre de 2012.
A día de hoy Citroën se las promete muy felices y el Citroën DS5, su apuesta más arriesgada e interesante, apunta directamente (en palabras de los propios representantes de la marca) al cliente que tradicionalmente se decantaría por una berlina premium, véanse un Audi A4 o un BMW Serie 3.
¿Lograrán sus objetivos DS4 y DS5? ¿En qué linea se moverá el próximo Citroën de la gama DS?
Fuente: Citroën
En Diariomotor: Citroën DS3, DS4 y DS5, la filosofía de la línea DS