Después de 39 meses de desarrollo, la nueva generación de Ford Focus ya está en el mercado desde la primera mitad de 2011 disponible con tres carrocerías diferentes: compacta de 5 puertas, sedán de 4 puertas y familiar o Sportbreak. Precisamente será este último el que centre la toma de contacto que un servidor llevó a cabo en carreteras francesas y alemanas, concretamente para recorrer los más de 700 kilómetros que separan París de Frankfurt con el objetivo de llegar a tiempo al salón del automóvil internacional que allí se celebraba este mismo mes.
Ya tuvimos ocasión de hablaros gracias a mi compañero Sergio de la carrocería compacta en la presentación del Ford Focus así como en una prueba en profundidad del Ford Focus 1.6 TDCi 115 CV Titanium. Esta vez completaremos nuestras impresiones con el análisis del Ford Focus Sportbreak 1.6 TDCi de 115 CV, un modelo que ya está a la venta en el mercado español desde 14.990€.
Ford Focus Sportbreak: la carrocería familiar de tres cuerpos
Pese a que toda la gama Ford Focus presume de su concepción global para todo el mundo, lo cierto es que su carrocería familiar de cinco puertas y tres volúmenes está pensada especialmente en el mercado europeo. No obstante, en América del Norte sólo se comercializará la carrocería familiar de cinco puertas y el sedán de cuatro puertas. De momento allí no llegará el Ford Focus Sportbreak y seguirán confiando las hipotéticas ventas de un vehículo familiar a las berlinas medias ya asentadas y su gama de todocaminos.
Tal vez en España no goce del éxito que sí tiene en el resto de Europa, el caso es que no resulta menos sorprendente que a nivel europeo el Ford Focus Sportbreak cope hasta un 38% de las ventas totales de la gama Focus. El top-ventas se lo llevaría el compacto con un 59% de las ventas y el margen restante, tan sólo un 3% se correspondería con el sedán de cuatro puertas. ¿Por qué mantener un sedán con un volumen tan bajo de ventas y no un compacto de tres puertas?
Sin que Ford se haya pronunciado aún al respecto la respuesta reafirmaría la idea de que aún estará por llegar un compacto de corte deportivo y juvenil, y por supuesto tres puertas, del óvalo azul. ¿No creen?
El nuevo Sportbreak es más grande y espacioso, pero también deportivo
No nos deja de sorprender lo atrevido de la estética del nuevo Ford Focus, su frontal que podría evocar la deportividad del Ford Focus RS, con mayor sobriedad por supuesto, su línea siguiendo las directrices de lo que llaman kinetic design, etcétera… Además de su carrocería alargada y por lo tanto más espaciosa, presenta algunas novedades estéticas interesantes respecto al modelo compacto, por ejemplo unos grupos de pilotos traseros alargados y más estilizados que los de su “hermano” pequeño de dos cuerpos.
El nuevo Ford Focus Sportbreak ha crecido en longitud hasta los 4.556 metros, apenas 8 centímetros más que su predecesor. Esto se hará notar en el habitáculo que ahora es más espacioso y confortable especialmente en las plazas traseras. Pero por su parte el espacio de carga teóricamente no ha crecido y se mantiene en 476 litros contando con que bajo el suelo aloja una rueda de recambio provisional de “galleta”.
El Ford Focus Sportbreak goza de una mayor rigidez estructural y mejor aerodinámica
Merece la pena mencionar y hacer un inciso a la hora de hablar del llamado Ford Intelligent Protection System, que atañe especialmente a la ingeniería del esqueleto del nuevo Ford Focus Sportbreak. Su estructura presume de contar con aceros de mayor rigidez que en cualquier Ford que le precediera. Su rigidez torsional ha aumentado en un 15%, mientras la rigidez estructural ha aumentado en algunos puntos hasta un 75%. Lo mejor de todo es que esto se ha conseguido sin que suponga un peso añadido respecto a su predecesor.
También se puede decir que en su diseño influyeron aspectos como la aerodinámica. Es más, el nuevo Ford Focus Sportbreak se muestra ligeramente más aerodinámico con un coeficiente del 0.293 respecto al 0.31 de la generación anterior.
Una completísima gama de niveles de equipamiento y motores entre 95 y 250 CV
Como el resto de la gama Ford Focus, estará disponible con motores de gasolina (incluidos los nuevos EcoBoost de 1.6 litros) y diésel entre los 95 y los 163 CV de potencia. Los motores de gasolina de 105 y 125 CV estarán disponibles únicamente con cambio manual de cinco velocidades, mientras que el resto gozará de caja de cambios manual de seis velocidades de serie y cambio automático PowerShift como opción.
Curiosamente y tal y como se hacía oficial poco después de que realizásemos esta prueba, la gama familiar acogerá también una versión deportiva denominada Ford Focus ST Sportbreak que contará con un motor de gasolina 2.0 EcoBoost, de cinco cilindros y 250 CV de potencia.
En cuanto a niveles de acabado y equipamiento el porcentaje de ventas dentro de la gama Ford Focus quedaría desglosado de la siguiente forma:
- Titanium, el más moderno, avanzado tecnológicamente y con acabados de calidad: 35%
- Sport, joven ágil y deportivo, una buena base para añadir personalizaciones: 24%
- Trend, básico y con la mejor relación calidad-precio: 39%
- Ambiente, gama de entrada y por lo tanto muy limitada para ser muy asequible: 2%
Todo un dispendio tecnológico al servicio del nuevo Ford Focus
Sinceramente, si hay una palabra que defina a la nueva generación de Ford Focus esa es tecnología. Por supuesto que el Ford Focus Sportbreak también contará con todo el dispendio de sistemas tecnológicos pensados en primer instancia para hacernos la vida más fácil, pero también más segura y eficiente, ahorrándonos unos eurillos cada vez que pasemos por la gasolinera.
Cuenta de serie y como opción, dependiendo de nivel de acabado y equipamiento, con el cierre de rejilla activo, sistema de ayuda de aparcamiento, control de crucero adaptativo, cambio de luces largas automático, parada y arranque automático, sistema de aviso de ángulo muerto, alerta al conductor somnoliento (o que va haciendo eses y maniobras extrañas), aviso de cambio involuntario de carril, frenada automática a baja velocidad, limitadores de velocidad, control vectorial de par (un control de tracción avanzado) y sistema de reconocimiento de señales.
En general por tecnología está a la altura, y en más de un caso por encima, del resto de sus rivales, tanto en el segmento generalista como premium. No obstante lo mejor de toda esta tecnología es que resulta relativamente asequible, de hecho en el caso que nos atañe, un Ford Focus Sportbreak con acabado Titanium podría contar con absolutamente todos estos extras añadidos por menos de 2.000€. Lo cual no está nada mal si tenemos en cuenta que más de 15 sensores y radares periféricos velarán por nuestra seguridad.
Fuente: Ford
En Diariomotor: Ford Focus Sportbreak 2011 | Ford Focus Sportbreak 2011 en París