Durante el pasado Salón de Frankfurt pudimos tener una breve toma de contacto con varios modelos recién llegados al mercado. Hoy os traemos nuestras impresiones sobre el Hyundai Veloster, un coupé original y moderno.
Hemos probado el único motor disponible en el Hyundai Veloster, un 1.6 de inyección directa de gasolina asociado en este caso a una caja de cambios automática de doble embrague que la marca denomina DCT. El acabado es el tope de gama, el Sport S.
Un concepto único
Hasta el momento habíamos visto coupés de dos o de tres puertas pero nunca ésta combinación de cuatro puertas formada por las dos delanteras, una trasera izquierda y el portón del maletero. Por una parte, el objetivo es hacer a éste coupé más práctico en el día a día y atraer a aquellos clientes que, por ejemplo, no pensaban en este tipo de coches por su dificultad, por ejemplo, para instalar una silla infantil.
Por otra parte, es una forma de ofrecer un producto original y diferenciarse de la competencia que ofrece un coupè tradicional. La verdad es que esa tercera puerta queda perfectamente integrada en el diseño del coche, de hecho una segunda puerta trasera también encajaría, pero restaría ventas al Hyundai i30.
El diseño en general es muy atractivo y juvenil. Una prueba de la clientela en la que piensa Hyundai con este Veloster es la gama de colores chillones con los que se puede combinar entre los que se encuentran dos tonalidades de naranja, rojo vivo, azul eléctrico o el indiscreto verde manzana de la unidad que probamos.
Ya desde la trasera apreciamos la presencia de rasgos dinámicos y detalles deportivos, como la doble salida de escape central. El frontal es el que ya empieza a ser común en toda la gama con la parrilla trapezoidal y con los faros que se alargan hasta los pasos de rueda delanteros. Precisamente los pasos de ruedas muy marcados protagonizan el lateral del coche, dónde también destacan las llantas que en la versión Sport S son de 18 pulgadas e incluyen inserciones en el color de carrocería.
Interior
El diseño interior del Veloster es una continuación perfecta del exterior, muy moderno y atractivo. La calidad de materiales y ajustes es buena, rozando el notable. Una vez más podemos apreciar la mejora de Hyundai en cada nuevo producto que lanza. La consola central en forma de V engloba todos los botones correspondientes a la climatización, dejando en la parte superior la pantalla táctil multifunción de 7 pulgadas.
Los asientos en ésta versión full equipe vienen tapizados en cuero y los delanteros son calefactables. El asiento del conductor es además regulable eléctricamente. Una vez sentados, un gran detalle de calidad y comodidad es el sistema que nos acerca el cinturón de seguridad, realmente lo deberían de llevar todos los tres puertas y evitar ejercicios de contorsionismo para tener que abrocharnos a la vida.
La habitabilidad tanto delante como detrás es correcta para un coche de 4,22 metros. Los asientos de corte deportivo son confortables pero la gran novedad es el fácil acceso a las dos plazas traseras gracias a esa tercera puerta de la que hemos hablado al principio, inédita en un vehículo de diseño coupé.
El maletero dispone de una buena capacidad de 320 litros. No obstante, la forma de la trasera hace que el borde de carga quede muy alto y el acceso no es muy amplio.
Mejor el motor que el cambio DCT
Conducir un coche durante pocos kilómetros no permite sacar conclusiones definitivas pero sí unas valiosas primeras impresiones. Siempre digo lo mismo en estos casos. El único motor disponible en el Hyundai Veloster es este 1.6 GDI de inyección directa de gasolina que rinde 140 CV.
El recorrido fue principalmente urbano con algunos kilómetros de Autobahn. El motor es muy suave, sube rápido de vueltas y es en la zona alta del tacómetro dónde ofrece su mayor fuerza. Por ese motivo, si no pisamos con decisión el acelerador el empuje no será notable. Aun así, no tenemos la sensación de disponer de 140 CV.
A ésta sensación también colabora el funcionamiento de la caja de cambios de doble embrague DCT. Como el motor hay que llevarlo revolucionado para una mejor respuesta, a poco que pisamos el acelerador el kick-down entra con mucha facilidad, haciendo la conducción realmente incómoda en muchas ocasiones. La solución es o aumentar velocidad de forma más progresiva o cambiar con las levas situadas tras el volante. Con el cambio secuencial, la caja sí se muestra rápida y es cómoda de usar.
Las prestaciones oficiales indican que hace el 0-100 km/h en 10.3 segundos y un consumo medio de 6.4 litros/100 km. Debido a la brevedad de la prueba no pude comprobar el consumo pero por la forma en la que hay que hay que llevar al motor, intuyo que esa cifra es muy optimista. Uno de los detalles que menos me ha gustado ha sido la mala visibilidad trasera debido a la luneta divida en dos.
Valoración final
El Hyundai Veloster es un coupé atractivo y original. También es práctico gracias a su tercera puerta. El motor es progresivo aunque le falta empuje a bajo y medio régimen. Es recomendable combinarlo con el cambio manual, que con total seguridad será más agradable de usar que el cambio DCT, al menos con este motor.
El precio del Hyundai Veloster 1.6 GDi Sport S con cambio DCT incluyendo pintura metalizada es de 31.040€ al que tendríamos que descontar la promoción actual de 2.000€. Ésta terminación es la más completa e incluye elementos como la tapicería de cuero, techo panorámico y sistema de navegación GPS. Bajo mi punto de vista es un precio muy elevado teniendo en cuenta las prestaciones del motor.
El acabado Sport con cambio manual, sin tener los tres elementos antes nombrados, sigue siendo muy completo y su precio con descuento incluido es de 21.490€, un precio más acertado teniendo en cuenta el motor y elequipamiento que ofrece. Aún así, la gama es muy limitada en opciones de equipamiento y de motores. Estoy convencido de que ofreciendo una alternativa diesel se vendería mejor.
Otro problema es que su máximo competidor y lider del segmento, el Volkswagen Scirocco, tiene actualmente un descuento de 3.265€ en el 1.4 TSi de 122 CV por lo que a igualdad de equipamiento saldría en 20.580€. Podríamos decir que este motor es como mínimo equivalente en prestaciones al del Veloster, ofreciendo con total seguridad mejores recuperaciones gracias al turbo. También aporta una mejor calidad interior. A cambio, el Hyundai ofrece más maletero, cinco años de garantía, y por supuesto, la práctica puerta trasera.
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