Poco ha tardado Brabus en depositar sus garras sobre el Mercedes SLS AMG Roadster, la última joya de la marca alemana. Fieles a su estilo, han realizado una completa puesta a punto del vehículo, comenzando por una potenciación del motor y finalizando en una actualización de la estética. Todo ello viene salpicado por el estilo propio de Brabus, que lleva años ofreciendo un estilo que gusta a propietarios de todo el mundo.
El corazón de este modelo, un 6.2 V8 AMG de 571 CV, ha recibido una serie de retoques para aumentar su potencia hasta la cifra redonda de 600 CV. Este incremento se debe a dos soluciones tan básicas como reprogramar la electrónica del motor y sustituir los escapes de serie por unos nuevos fabricados en titanio con un diámetro de 84 mm. El preparador no ha comunicado si estas modificaciones redundan en una mejora de las prestaciones, pero probablemente sea una mejora ínfima.
En el chasis no nos encontramos cambios importantes más allá de la instalación de una nueva suspensión que permite variar la altura total del coche en hasta 40 mm, ofreciendo efectivamente un mayor o menor dureza de las suspensiones en función de la conducción deseada. Este sistema permite elevar las suspensiones delanteras hasta en 50 mm para superar obstáculos difíciles. La transmisión o el equipo de frenado permanecen intactos, sin ninguna alteración que optimice el comportamiento del coche.
En el apartado estético, Brabus ha aplicado los típicos cambios que suelen realizar a los modelos de la marca de la estrella, con un estilo propio claramente identificable con la compañía. Se ha instalado un kit estético de fibra de carbono consistente en un parachoques frontal, faldones laterales, un nuevo difusor trasero y las branquias laterales. Además, se ha instalado un juego de llantas diseño Motorsport F Platinum Edition, en medida de 20 pulgadas en el eje delantero y 21 pulgadas en el trasero.
Tanto la carrocería como las llantas pueden tener otros colores diferentes a los de las fotos de estudio. Esta libertad también se permite en el interior, donde Brabus ofrece un completo catálogo de materiales y colores para personalizar el habitáculo a medida del comprador. En resumen, esta preparación busca diferenciar el Mercedes SLS AMG Roadster sin caer en la estridencia, ya que ni los cambios estéticos ni la potenciación del motor resultan excesivamente llamativos.
Fuente: WCF
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