Jaguar sigue confiando en su futuro en una importante ampliación de su gama de vehículos, por arriba y por abajo. La última incorporación en la gama británica, y probablemente al resto de la gama europea, será una versión más modesta del motor diésel de cuatro cilindros y 2.2 litros que conocíamos hasta ahora cuya potencia ha quedado limitada a 161 CV (-29 CV) a favor de una tarifa de venta al público más económica. De hecho estará por debajo de la frontera psicológica de las 30.000 libras, unos 36.250€ según el cambio actual que no se corresponderán con la tarifa en España donde difícilmente bajará de los 44.000€.
El nuevo Jaguar XF 2.2 Diésel de 161 CV mantiene su eficiencia y sus consumos. Sus emisiones de CO2 se plantan en 149 g/km y su consumo en ciclo mixto homologado es de apenas 5.4 litros/100 kilómetros, lo que con un depósito de 64 litros supone una autonomía cercana a los 1.200 kilómetros.
De serie no obstante ya contará con un equipamiento bastante completo que incluye asientos de piel, pantalla táctil central, climatizador electrónico y un cambio de 8 velocidades con sistema de parada y arranque automático start/stop.
Sus prestaciones en cambio se verán notablemente resentidas. El 0 a 100 km/h le lleva 9.8 segundos y su velocidad punta es de 209 km/h, cifras bastante modestas para una berlina de estas características pero a buen recaudo suficientes para muchos compradores que quieren obtener un buen sedán de lujo y relativamente económico prescindiendo de demasiada potencia.
Definitivamente la panacea de los consumos ajustados y las prestaciones sigue siendo el motor diésel biturbo de 3.0 litros que homologa sólo 6.3 litros/100 kilómetros y desarrolla 240 y 275 CV de potencia. Claro que le precio base de este Jaguar XF sigue siendo significativamente mayor, partiendo de los 53.600€ “puesto en casa”.
Por precios se situaría en el rango del BMW 520d automático (184 CV).
Fuente: Jaguar
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