Desde hace unas semanas, los principales medios de comunicación económicos de EEUU han hablado de los planes de General Motors de intentar adquirir una parte del Grupo PSA, la casa matriz de las marcas francesas Peugeot y Citroën. Desde Diariomotor no habíamos informado al respecto ya que podría tratarse de uno de los múltiples rumores que aparece cada semana, pero poco a poco van vislumbrándose más detalles de las intenciones de ambos gigantes automovilísticos, cada vez más cerca de llegar a una relación de hecho.
Hace apenas unos días, un directivo de PSA aseguró que estaban en contacto con General Motors para negociar posibles alianzas entre ambas partes, pero hasta hoy no se ha sabido cómo de avanzadas están esas negociaciones. La agencia Reuters recoge las palabras de un directivo de General Motors, que asegura que quieren adquirir menos del 5% del accionariado de PSA. Por otra parte, Bloomberg asegura que en los próximos días será anunciada la adquisición de un 7% de las acciones de PSA por parte de General Motors.
En ambos casos se da por seguro que la empresa estadounidense entrará en el accionariado del grupo francés con una pequeña participación. La opción que toma más fuerza es la del 7%, ya que varios portales económicos apuntan a esa posibilidad citando a una fuente directamente relacionada con la operación. En este supuesto, General Motors se comprometería a no ampliar su capital en PSA sin antes recibir permiso del grupo francés, por lo que se descarta por completo un hipotético intento suicida de adquirir PSA.
Más de un lector se estará preguntando por qué General Motors tiene tanto interés en establecer vínculos con Peugeot-Citroën. La razón es sencilla: el gigante de Detroit aún no sabe qué hacer con Opel, cuya rentabilidad aún está lejos de lo que se había previsto. Después de haber truncado su venta hace ya más de dos años, en Jefferson Avenue quieren reflotar la marca alemana con sus propios medios, por lo que una colaboración con Peugeot y Citroën proporcionaría componentes para la fabricación de coches a un precio más bajo que si lo desarrollaran por cuenta propia.
En el otro extremo de la balanza se sitúa Peugeot-Citroën, cuyo mayor interés en esta operación reside en la posibilidad de poder reducir la gran deuda que acumula, avivada en los últimos meses por la notable caída de ventas que han sufrido en Europa (un 8,8% menos en 2011). Para obtener liquidez, han anunciado la venta de activos por valor de 1.500 millones de euros. La entrada de General Motors proporcionaría más efectivo al grupo, con una deuda establecida en unos 3.400 millones de euros.
Así pues, todo parece indicar que en los próximos días veremos un anuncio oficial por parte de ambas partes anunciando un acuerdo cuyos términos generales serán aproximadamente los mismos que aquí comentamos. Quizá ambas aprovechen la conferencia de prensa del Salón de Detroit para hacer pública esta alianza, que hace tan sólo unos pocos años hubiera sido impensable.
Fuente: Autonews | BMW y PSA extienden su acuerdo de colaboración
En Diariomotor: Opel aún no es rentable y General Motors sigue sin verlo claro