El nuevo Mini John Cooper Works GP habría sido confirmado oficialmente y su presentación tendría lugar en el próximo Mini United 2012 en mayo, en el Circuito Paul Ricard en Francia. De momento no hay más detalles oficiales, pero podemos ir adelantando que esta versión limitada y exclusiva del famoso Mini vendrá cargada de deportividad, detalles que lo diferencien de los Cooper S y John Cooper Works y superando holgadamente los 200 CV (alguno se atreve a hablar de más de 250 CV) gracias al archiconocido bloque Turbo de 1.6 litros que además de la inyección directa podría recibir el nuevo alzado variable de válvulas Valvetronic del Grupo BMW.
Es difícil adelantar si mantendrá detalles de su predecesor tan peculiares como la ausencia de plazas traseras para ahorrar peso. De hecho una de las facetas más interesantes del Mini John Cooper Works GP radicaba en este punto y en el ahorro de peso para mejorar aún más sus prestaciones. No obstante, el contexto ha cambiado respecto al modelo original lanzado en 2006, puesto que ahora este movimiento tendría menos sentido si tenemos en cuenta que para biplaza la oferta de Mini ya contaría con el Mini John Cooper Works Coupé, amén del correspondiente descapotable Mini John Cooper Works Roadster.
El primer Mini John Cooper Works GP se lanzaba en 2006, limitado a 2.000 unidades
Con todo, el Mini John Cooper Works GP pretende ser un juguetito de track-day y fin de semana, ya no sólo en el hipotético caso de que carezca de plazas traseras, sino también por el mero hecho de contar con suspensiones pensadas para tal fin y no para el confort de la conducción diaria. Amortiguadores más rígidos y con un menor recorrido, suspensiones rebajadas y pingües mejoras en el equipo de frenos que se unirán a un completo kit aerodinámico que le confiera un toque de distinción añadido a este diminuto deportivo que con un precio considerablemente más económico irá tras la estela del Audi A1 Quattro (no obstante la amenaza sólo atañe al pequeño golpe moral que pueda suponer un precio más competitivo, dado que comercialmente ambos liquidarán sendas tiradas limitadas).
En la mente de todos aún estará el trabajo de PSA sobre el bloque de 1.6 litros, el mismo compartido con Mini, para hacer que el Citroën DS4 Racing Concept presentado en Ginebra hace un mes desarrollase 256 CV de potencia. En este punto es razonable que más de uno ya se espere el Mini más potente de la historia y una pieza no sólo deseada por quemadillos (en el buen sentido de la palabra) y petrolheads, sino también por coleccionistas que quieran hacerse con un modelo tan interesante como exclusivo y valioso con el paso del tiempo.
Fuente: EVO.co.uk
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