El Peugeot 205 GTI ha sido tradicionalmente el “hot hatch” de referencia. Este icono de los años 80 destacó por un equilibrio muy logrado entre prestaciones, ligereza y sensaciones. Sus versiones más potentes montaban un goloso motor 1.9 de gasolina, un atmosférico de 130 CV que moviendo un peso inferior a los 900 kg, era capaz de hacer maravillas. Los especialistas de Peugeot británicos Pug1Off han lanzado una oferta de personalización y potenciación de lo más interesante.
Lo que Pug1Off propone es deshacerse del 1.9 XU9 de 130 CV y reemplazarlo por el potente XU10J4RS de 2.0 litros que movía a los Peugeot 306 GTI-6, con 167 CV de puro nervio francés. Es un propulsor probado y fiable, un clásico entre los entendidos de los GTI. Es más, Pug1Off ofrece montajes según las normas del Grupo N, así como la posibilidad de asociarlo a un diferencial autoblocante mecánico Quaife y la caja de cambios de 6 relaciones de un 306 GTI-6, por 2.190 libras adicionales.
El transplante de motor cuesta 2.220 libras, con el coche original aportado por el cliente, lo que me parece un precio muy bueno, habida cuenta que el nuevo propulsor sale con una garantía de 20.000 km. Para algunos esto no es suficiente aún, y por ello pueden encargar el kit de potenciación Stage 2. Sin sobrealimentar, el motor desarrolla 195 CV a 7.400 rpm, gracias a unos nuevos árboles de levas, colectores y reprogramación de la centralita electrónica. La potenciación cuesta casi 1.600 libras.
Adicionalmente, podemos equipar a nuestro 205 GTI con el equipo de frenado de un Peugeot 206 RC, con sus correspondientes discos delanteros de 283 mm. Si somos unos sibaritas podemos encargar la instalación de una suspensión Bilstein de Grupo N, con sus correspondientes estabilzadoras reforzadas y barra de torsión mejorada. Con todos estos cambios, nuestro 205 GTI puede subir de nivel exponencialmente, llegando a alcanzar cifras como 218 CV/tonelada y un estátus de matagigantes.
Fuente: Pug1Off
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